Desde temprano y hasta tarde, en TikToK y Facebook, el 1 de octubre de 2024 fue el día en que los mexicanos de a pie y la sociedad digital presenciaron, comentaron, debatieron, celebraron y, algunos, se entristecieron con la llegada de Claudia Sheinbaum Pardo al poder presidencial en México. La primera mujer en hacerle jaque al patriarcado político en nuestro país.
La guerra de trincheras partidistas se expresó como nunca antes a través de casi 300 millones de conversaciones en los medios sociodigitales. A lo largo del día pudo observarse cómo iban subiendo y bajando los temas. La mayoría de los usuarios le ponía caritas felices a Claudia, otros debatían sobre el video de Marcelo Ebrard. “Hasta siempre amigo”, decía el nuevo secretario de Economía. Y enseguida ponía videos de sus andanzas con su compañero de mil batallas, Andrés Manuel López Obrador, presidente saliente.
El reporte de MilenIA, Central de Datos e Inteligencia Artificial muestra que Sheinbaum detonó 76 por ciento de conversaciones positivas en redes sociales durante el día en que tomó posesión como Presidenta de México. Y aunque superó a AMLO en la cantidad de menciones (112 versus 104 millones de interacciones), el mandatario saliente la empató en cariños digitales: 76 por ciento. Apenas unas décimas arriba quedó la aún vecina de Tlalpan.
Hace unos días, informábamos que la ex jefa de Gobierno de la Ciudad de México había generado 71 por ciento de reacciones aprobatorias en los últimos cuatro meses. En su asunción, avanzó cuatro escalones.
La banda presidencial cruzando el vestido blanco de la nueva mandataria, su sonrisa, su tono firme, esa mano en el hombro de la líder histórica de la izquierda mexicana, Ifigenia Martínez, quedaron registrados en TikTok, YouTube, X (antes Twitter), Facebook e Instagram. Los 100 compromisos lanzados en el Zócalo encendieron las conversaciones en redes sociales, pero el momento de mayor temperatura ocurrió al filo de las 11:30 de la mañana, cuando #EsClaudia pronunciaba su discurso de aceptación en la Cámara de Diputados.
En contraste, si a mediodía el Rey Felipe IV de España acaparaba las críticas en los medios sociodigitales, para la tarde-noche Norma Piña sumaba 70 por ciento de sensaciones de enojo, precaución, disgusto y miedo. Toda líder necesita una antiheroína. Y a la ministra presidenta de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) le ha tocado jugar ese papel, ayer y en los últimos meses, a pesar de aquella sonrisa conmovedora que se le escapó cuando miraba a Sheinbaum pronunciar su discurso en el Congreso mexicano. La foto quedará para el recuerdo.
Los habitantes de la aldea digital fueron especialmente inclementes con la senadora plurinominal Lilly Téllez, luego de que escribiera:
“No @XochitlGalvez, no es correcto desearle éxito a Sheinbaum, porque si le va bien a ella, le irá mal a México. Es irrelevante que sea mujer, lo importante es que no respeta la democracia ni la libertad. Hay que oponernos con decisión y dignidad al continuismo que destruye”.
Las denostaciones a la sonorense estallaron con el hashtag “#LaLocaDelSenado”.
Burbuja pinchada
El discurso opositor que asegura que México atraviesa por una polarización en dos poderosos frentes de nuevo quedó exhibido. Sólo 24 por ciento de los mexicanos criticó a Sheinbaum y López Obrador. Únicamente el 30 por ciento defendió a Norma Piña.
¿Fue un error no invitar al Rey de España a la toma de posesión? El 34 por ciento manifestó que sí, el 66 por ciento celebró pintarle raya al monarca. De hecho este tema se coló con enjundia en las discusiones entre la banda.
No sólo Norma Piña recibió cocolazos (70 por ciento), el Congreso mexicano fue reprobado por el 59 por ciento de los usuarios de redes sociales. Gerardo Fernández Noroña, presidente del Senado, se llevó rechiflas del 54 por ciento y aplausos en el 46 por ciento.
Hacia la una de la tarde, Ifigenia Martínez motivaba sentimientos positivos en el 75 por ciento de la gente, pero una ola de críticas a su edad y a que llegó en silla de ruedas, así como haber dicho “Claudia Shainbaum” en vez de “Sheinbaum” despertó lamentables expresiones de gerontofobia y cerró la jornada con 55 por ciento de buenas vibras y 45 por ciento de malas ondas. Así son las redes.
La aldea digital vibró fuerte durante la toma de posesión de la primera Presidenta de México, dejando ver que los sentimientos de la calle se espejean con las interacciones de redes sociales. No son iguales, pero se les parecen.
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Con información de Omar Cordero.
KL