Banco BASE advirtió que los datos de inflación de la primera quincena de junio evidencian que las presiones inflacionarias no han cedido y que de continuar durante los próximos meses, es altamente probable que las previsiones de inflación hacia el cierre del año sigan siendo revisadas al alza hacia 8 por ciento.
La directora de análisis económico-financiero de Banco BASE, Gabriela Siller, refirió que el dato de inflación de la primera quincena de junio sorprendió al alza al comparar con las expectativas del mercado y muestra que las presiones al alza siguen fuertemente concentradas en el componente subyacente, que determina la trayectoria de la inflación en el mediano y largo plazo.
“Por lo anterior, es probable que hoy a las 13:00 horas el Banco de México suba su tasa de interés en 75 puntos base. Además, se espera un lenguaje más restrictivo en su comunicado y una revisión al alza de sus proyecciones de inflación. No se descarta un incremento de 100 puntos base a la tasa de interés, por el aceleramiento de la inflación, concentrado en el componente subyacente”, dijo.
La directiva de Banco BASE señaló que en la primera quincena de junio de 2022, la inflación se ubicó en una tasa anual de 7.88 por ciento, su mayor nivel desde la primera quincena de enero del 2001 y a tasa quincenal, la inflación se ubicó en 0.49 por ciento, la mayor para una quincena igual desde 1998.
Agregó que la inflación subyacente, que determina la trayectoria de la inflación general en el mediano y largo plazo se ubicó en una tasa de 7.47 por ciento anual, su mayor nivel desde la segunda quincena de diciembre del 2000. A tasa quincenal, se ubicó en 0.50 por ciento, la mayor para una quincena igual desde 1998 y también la mayor inflación quincenal en lo que va del año.
Gabriela Siller explicó que 75 por ciento de la inflación general quincenal (0.49 por ciento) estuvo explicado por el componente subyacente. Al interior, el componente de mercancías alimenticias mostró una inflación quincenal de 0.74 por ciento y anual de 11.71 por ciento, nuevo máximo desde la segunda quincena de diciembre de 1999. Con esto, la inflación anual de mercancías alimenticias acumula seis quincenas por arriba del 10 por ciento.
Por otro lado, abundó, la inflación no subyacente se ubicó en 9.13 por ciento anual y 0.49 por ciento quincenal. Si bien las presiones no son tan evidentes como en el componente subyacente, se trata de la mayor inflación quincenal para un periodo igual desde 2012.
Al interior, el componente de productos agropecuarios subió 0.85 por ciento quincenal ubicándose en 14.31 por ciento anual, con el componente de frutas y verduras subiendo 1.03 por ciento quincenal y el de productos pecuarios 0.71 por ciento quincenal. Finalmente, entre los energéticos la inflación quincenal fue de 0.18 por ciento, ubicándose en una tasa anual del 5.84 por ciento, indicó la economista de Banco BASE.
IPM