El Banco de México (Banxico) realizó ayer la primera subasta de coberturas cambiarias liquidables en moneda nacional, dividida en seis bloques con diferentes plazos —mínimo de 30 días y máximo de 360—, cuya demanda duplicó el monto ofrecido.
No obstante, tras una semana donde el peso logró ganar terreno frente al dólar y alcanzó el precio más bajo en el año, ayer la moneda mexicana no se vio beneficiada por la nueva herramienta del Banxico, pues analistas consideran que pesa más la cautela del mercado sobre la decisión de la Reserva Federal (Fed) de Estados Unidos a mediados de marzo, ya que la probabilidad de que aumente su tasa de interés referencial es de 98 por ciento.
En operaciones al mayoreo, el tipo de cambio finalizó la jornada del lunes con una depreciación de tres centavos respecto a su cierre anterior, al cotizarse a la venta en 19.57 pesos por dólar. En sucursales bancarias el tipo de cambio se vendió en niveles de 20 pesos.
De acuerdo con la información publicada por el Banxico, en las seis subastas de venta de coberturas cambiarias el monto demandado fue de 2 mil 075 millones de dólares y el monto subastado fue de mil millones. Se recibieron 100 posturas de 67 postores.
El mayor monto subastado estuvo concentrado en vencimientos inferiores a 178 días. La mayor demanda se registró en el vencimiento del 1 de marzo de 2018, en el que se subastaron solo 100 millones de dólares para seis postores. El tipo de cambio máximo subastado para esta fecha fue de 20.50 pesos por dólar.
La siguiente subasta con mayor demanda fue la que tiene vencimiento el 14 de diciembre, con un tipo de cambio máximo de 20.23 pesos por dólar.
El área de análisis de Grupo Financiero Ve por Más indicó que el consenso de economistas prevé que el tipo de cambio se sitúe en 21.68 pesos por dólar al cierre de este año, 7.2 por ciento superior a la cotización de 20.23 presentada en el vencimiento de diciembre, lo que significa que el Banxico deberá asegurar la diferencia en pesos al vencimiento de dicho instrumento.
Agregó que si bien las subastas fungen de apoyo ante escenarios de volatilidad al generar certidumbre entre los participantes, por lo que su implementación es positiva, no hay que perder de vista que la evidencia empírica muestra que su efecto tiende a disiparse en el mediano y largo plazos.
Los riesgos para la divisa mexicana continúan y entre éstos destaca el ciclo de alza en tasas de la Fed, el crecimiento del déficit de la cuenta corriente, la utilización del peso como divisa de cobertura de mercados emergentes, posibles cambios en la calificación crediticia del país y la sensibilidad a la relación comercial México-EU.
Lo anterior, detalló la institución financiera, sustenta la visión de que en los siguientes meses puede continuar los episodios de volatilidad y, por ende, no se puede descartar que el peso registre una senda de depreciación. Prueba de ello es que los postores esperan un mayor tipo de cambio hacia finales de año, lo que resultó en un aumento de la demanda en las subastas con vencimientos en el mediano plazo.
El área de análisis de Banco Base comentó que si bien es cierto que en la subasta de coberturas cambiarias la demanda no fue excesiva, los inversores han visto la oportunidad para cubrirse del riesgo de una próxima depreciación durante el año, mientras que expertos de Monex consideran que los precios de los últimos días consolidan un piso y estiman que es una buena oportunidad para comprar dólares y realizar coberturas cambiarias.
Exxon invierte
Exxon Mobil anunció que invertirá 20 mil mdd en los próximos 10 años, y creará 45 mil nuevos empleos en la construcción y operación de una serie de plantas petroquímicas en el Golfo de México.
En el contexto de la conferencia anual de energía CERAweek, en Houston, se dijo que la inversión está orientada a “aprovechar la revolución energética” que se registra en Estados Unidos por el aumento en la producción de petróleo y gas.