¿Qué son las calificaciones y perspectivas crediticias?

El mercado está preocupado por un posible recorte a la calificación crediticia, debido al alto volumen de capital extranjero de cartera que ha entrado al país, dado al diferencial que se tiene de tasa de interés con Estados Unidos.

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Editorial Milenio
Ciudad de México /

Luego de los ajustes que han hecho algunas calificadoras a las perspectivas de las calificaciones de México, Pemex y otras empresas se empezó a especular que a México le recortarían la calificación crediticia y que podría perder el grado de inversión.

Pero empecemos por el principio...

¿Qué son las calificaciones y perspectivas crediticias?

La calificación crediticia es una medida que refleja el riesgo de que una entidad no pueda cumplir con sus obligaciones financieras. Entre más alta sea la calificación crediticia implica menor riesgo. Cada calificadora tiene su propio modelo con el que evalúa de manera cualitativa y cuantitativa las deudas emitidas por empresas y gobiernos. 

Calificaciones de México

México con S&P tiene una calificación de “BBB+”, con Fitch Ratings también es de “BBB+”, con Moody’s es de “A3” y con HR Ratings en “HR A-“.

Además de la calificación crediticia está la perspectiva, que indica hacia dónde podría moverse la calificación crediticia. Así, una perspectiva positiva indica que la calificación podría mejorar. Por el contrario, una perspectiva negativa señala que la calificación podría ser recortada. Por su parte, la perspectiva estable indica que no se anticipan movimientos en la calificación crediticia.

Perspectivas de México

Para el caso de México, la perspectiva de la calificación crediticia se encuentra en negativa con S&P desde el viernes y con Fitch y HR desde octubre, después de la consulta pública en la que se decidió la cancelación del Nuevo Aeropuerto Internacional de México.

La perspectiva negativa obedece a la preocupación sobre las finanzas públicas de México, ya que la mayoría de los analistas han recortado a la baja la proyección de crecimiento económico para este año y, con menor crecimiento también se espera una menor recaudación tributaria. Además, la calificación crediticia de México en el pasado ha estado determinada en parte por la situación de Pemex y actualmente existen dudas sobre su viabilidad financiera, sobre todo tras ser canceladas las rondas de licitación de la reforma energética y por el anuncio de la construcción de una refinería. 

Cabe mencionar que México tiene actualmente una razón de deuda sobre el PIB del 45.9% y el Fondo Monetario Internacional ha recomendado a México que no suba del 50%, lo cual le da un bajo margen de maniobra.

¿Cuál es la preocupación con México?

El mercado está preocupado por un posible recorte a la calificación crediticia, debido al alto volumen de capital extranjero de cartera que ha entrado al país, dado al diferencial que se tiene de tasa de interés con Estados Unidos.

De acuerdo con un análisis de Banco Base, de 2008 a 2018 entraron 298.27 mil millones de dólares en inversión extranjera de cartera que representa 87.59% del valor de capitalización de la Bolsa Mexicana de Valores.

"Por supuesto no todo está invertido en bolsa, una buena parte está invertida en instrumentos gubernamentales, en donde el 32.3% de éstos se encuentra en manos de extranjeros. Un recorte en la calificación crediticia podrá causar que parte de esos capitales salieran, generando un desbalance en las cuentas externas de México. Asimismo, implicaría también una mayor percepción de riesgo sobre la economía".

A pesar de que se podría observar un recorte en la calificación crediticia, México está lejos de perder su grado de inversión, pues se encuentra cuatro nodos del grado especulativo con Moody’s y HR ya que tendría que pasar de “A3” a “Ba” y de “HR A-” a “HR BB+” respectivamente.

Para el caso de Fitch y S&P se encuentra a tres nodos del grado especulativo y tendría que pasar la calificación de “BBB+” a “BB” respectivamente. Las calificadoras generalmente recortan un nodo su calificación y lo hacen en dos nodos cuando se observa un deterioro importante en la situación financiera (tal como ocurrió con Pemex). De esta forma, la probabilidad que México pierda el grado de inversión, al menos este año, es prácticamente nula. Sin embargo, el recorte de un sólo escalón en la calificación y el incremento en la especulación sobre un posible recorte podría llevar al tipo de cambio a niveles cercanos a los 20 pesos por dólar.

MCM

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