El gobernador de Michoacán, Alfredo Ramírez Bedolla, aseguró que la retención de inspectores fitosanitarios de Estados Unidos que derivó en la suspensión de su exportación de aguacate, no fue por un tema de delincuencia, sino tras una manifestación, y prevé que incluso en horas pudieran renovarse las revisiones y los envíos de la fruta.
En entrevista con Enrique Burgos, para MILENIO Televisión, Ramírez Bedolla descartó temas de delincuencia "común u organizada" y que la manifestación era de carácter social.
"Iban transitando los dos agente de la embajada norteamericana, que hay que decir, son mexicanos pero son trabajadores de la embajada norteamericana, de la inspección del aguacate para el tema fitosanitario”, aseguró el gobernador de Michoacán.
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Los hechos ocurrieron durante un bloqueo que mantienen ciudadanos en la comunidad de Aranza, en Paracho, el viernes por la noche, pero para el sábado los inspectores fueron liberados y les entregaron sus vehículos y pertenencias.
Ese mismo día, explico el gobernador, se puso en contacto con el agregado para Seguridad de la embajada estadunidense para trabajar en un nuevo protocolo de seguridad para los inspectores, que implique acompañamiento de autoridades, trabajos de inteligencia y divulgación de información de seguridad, así que espera que incluso en “próximas horas” pudieran reiniciarse las inspecciones.
“Son casi 100 inspectores en Michoacán, porque cubren 54 municipios de Michoacán, casi 200 mil hectáreas de aguacate y unas 20 o 30 mil hectáreas de mango”, abundó el mandatario estatal.
Finalmente, aseguró que las autoridades estadunidenses están receptivas con el trabajo para nuevos protocolos de seguridad y detalló que hasta el momento no hay una afectación relevante al mercado nacional por el aguacate que no se está enviando a Estados Unidos, pues está siendo consumido por el mercado local.
aag