La Comisión Federal de Electricidad (CFE) reporta que 10 por ciento de las pérdidas por fallas no técnicas de energía es por errores en los hogares o malas instalaciones, lo cual se calcula en 3 mil 270 millones de pesos en los últimos 12 meses terminados a octubre pasado.
Las fugas que suceden en los hogares pueden ir desde instalaciones o equipos averiados, degradados o que por malas prácticas no funcionan correctamente, señala la Asociación Mexicana de Empresas de Eficiencia Energética (Ameneer).
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Estas pérdidas que sufre la CFE se las cobran de alguna manera a los consumidores, por lo cual siempre se recomienda revisar los recibos de luz porque es una forma de detectar si hay una fuga que afecte a la economía del hogar, ahora más con el incremento en el precio de la potencia.
Por ello, la Ameneer recomienda desconectar equipos eléctricos que no estén en uso, como cargadores de celular o focos encendidos, ya que son las principales fugas energéticas que se generan dentro del hogar.
En el caso de las empresas y negocios se debe realizar revisiones continuas en las instalaciones porque por su uso intensivo puede degradarse; un mantenimiento o cambio reducirá la pérdida por mala operación.
También se recomienda la instalación de equipos de medición como flujómetros, analizadores de red, analizadores de combustión o inclusive cámaras termográficas donde periódicamente se podrá observar las fluctuaciones de energía o de consumo.
Además sugiere la asociación hacer una análisis de datos energéticos como adquisición de datos, evaluación de consumos y de manera más técnica análisis estadístico para conocer el uso más significativo de la energía.
Con esto se puede identificar aquellos sistemas que más consumo de energía tienen, siendo aquí donde se encuentran las fugas energéticas ya que si el equipo no es indispensable para la casa o negocios, nos está produciendo una fuga energética.
Llevando a algunas de estas acciones se puede alcanzar una mejor eficiencia energética y con ello un cuidado del medio ambiente, disminución en el recibo de luz, ahorros económicos de tipo operativo y bajar las emisiones de CO2.
AMP