Ante temores de que las crecientes presiones sobre los precios lleven a la Reserva Federal a endurecer su política antes de lo esperado, la curva de rendimiento de los bonos del Tesoro de Estados Unidos se aplanó tras cifras más altas a las previstas en los precios al consumidor en junio.
El índice de precios al consumidor aumentó 0.9 por ciento el mes pasado, la mayor alza desde junio de 2008, tras avanzar 0.6 por ciento en mayo. El denominado IPC subyacente se incrementó 4.5 por ciento interanual, el avance más pronunciado desde noviembre de 1991, tras subir 3.8 por ciento en mayo.
El retorno del bono a 10 años saltó a 1.39 por ciento antes de caer nuevamente a 1.34 por ciento. El rendimiento del papel a 2 años, que es muy sensible a las expectativas de las tasas de interés, subió a 0.25 por ciento desde 0.22 por ciento.
La curva de rendimiento entre las notas a 2 y 10 años se aplanó a 110 puntos básicos.
Es probable que se le pregunte al presidente de la Fed, Jerome Powell, sobre los datos cuando testifique ante el Congreso el miércoles y jueves, y sus comentarios serán evaluados en busca de indicios de que está cada vez más preocupado por las crecientes presiones sobre los precios.
Las minutas de la reunión de junio de la Fed, publicadas la semana pasada, mostraron que los funcionarios sintieron que los avances sustanciales en la recuperación económica "en general aún no se habían cumplido".
El Tesoro venderá 24 mil millones de dólares en bonos a 30 años hoy.
srgs