Los teléfonos móviles tuvieron una importancia aún más crucial durante el confinamiento, a través de este dispositivo la sociedad pudo mantenerse a flote, estudiar, trabajar, adquirir productos y servicios y mantenerse informada y comunicada con sus seres queridos desde la palma de la mano. En México la preferencia del mercado la tiene Samsung con 32.2 por ciento del total de equipos operando en el país.
De acuerdo con el estudio “Dimensionamiento del Mercado de Smartphones en México” elaborado por The Competitive Intelligence Unit (The CIU), al cuarto trimestre de 2020, Samsung registró una disminución de 3 puntos porcentuales como consecuencia del incremento del precio de los dispositivos, lo que motivó a usuarios de gama baja a migrar a otras marcas, sobre todo en un entorno económico adverso por la pandemia.
En segundo lugar, se ubica Motorola, que alcanza una cuota de mercado de 20.3 por ciento y que aumentó su participación en 1.6 por ciento durante el confinamiento. Sus esfuerzos se han enfocado en la oferta de dispositivos de gama media en México, aunque recientemente retomó la pelea en la gama alta al traer de nuevo a México sus flagships Moto Edge Plus y Moto g100, que lo hace adversario digno de competir con marcas como Samsung y Apple por aquellos usuarios que buscan equipos con capacidades superiores.
En tercer lugar se ubica el fabricante chino Huawei, con una participación de mercado de 14.2 por ciento, mismo nivel que ostentaba hace un año. Y en cuarto lugar, se ubica Apple, con una cuota de mercado de 10.4 por ciento. El fabricante estadounidense registró una disminución de 1.9 puntos porcentuales.
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“Este descenso está directamente asociado a la profunda y longeva crisis económica que vive el país, que ha mermado la disponibilidad de recursos para hacerse de equipos de esta marca y que ha llevado a los usuarios a adquirir dispositivos de otros fabricantes”, dice el autor del informe, Rolando Alamilla.
Mientras que en el quinto lugar está LG, que recién anunció la salida del mercado de smartphones y que actualmente tiene una participación de mercado de 6.7 por ciento. The CIU revela que el fabricante surcoreano ha perdido posicionamiento, en el último semestre cayó 1.5 puntos porcentuales, además bajó su penetración del mercado del segundo lugar en 2017 al quinto.
“Las limitantes que enfrenta Huawei, así como la salida de LG a esta línea de negocios, detonarán cambios significativos en el ecosistema de fabricantes de equipos. Estos dos jugadores suman más de 20% del mercado, en términos de preferencia, cuota que buscarán atraer sus competidores, incluso nuevas marcas que han llegado a México en los últimos meses como es el caso de OnePlus o Xiaomi”, afirma Alamilla.
Al cierre de 2020, se contabilizó un total de 115.8 millones de dispositivos móviles inteligentes en México, que representa una adopción de 91.6 por ciento sobre el total de las 126 millones de líneas que se encuentran operando en el país.
Efecto Covid-19 impulsa gama baja
En México, es posible adquirir un smartphone desde 599 pesos, lo que evidencia una competencia en precios para todos los segmentos de la demanda. Así que se ha intensificado el impulso competitivo entre fabricantes, que empodera al usuario a adquirir un dispositivo de la marca que se ajuste en mejor medida a las capacidades y necesidades a satisfacer, dice The CIU.
La crisis económica afectó a los usuarios, quienes al adquirir un smartphone en el cuarto trimestre de 2020 se inclinaron a hacerlo en mayor porcentaje de gama baja (de precio máximo de 3 mil pesos); 34 por ciento, frente a 32 por ciento del segundo trimestre, cuando apenas comenzaba la crisis sanitaria y el confinamiento.
Alamilla concluye que la profundidad del impacto recesivo y su duración, resultado de la crisis sanitaria, son aún difíciles de calcular con precisión. No obstante, en tanto se mantenga el confinamiento, los usuarios seguiremos haciendo uso cada vez más intensivo de nuestros equipos, ello impulsará la demanda/adquisición de equipos en los próximos meses, ante una economía que transita aceleradamente a su plena digitalización.
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