El gobierno federal cerró filas con las aerolíneas mexicanas para recuperar en el menor tiempo posible la categoría 1 de seguridad aérea otorgada por la Administración Federal de Aviación de Estados Unidos (FAA), calificación que, de acuerdo con controladores aéreos y pilotos, se hubiera podido mantener atendiendo a los señalamientos que se ya habían hecho de manera interna.
El pasado martes la FAA informó que la calificación de México bajaría a categoría 2 debido a que encontró diversas inconsistencias en las revisiones que hizo.
En un comunicado, la Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT) informó que se reunió con altos directivos de las aerolíneas comerciales del país, para definir la ruta a seguir, además de integrar una mesa de trabajo intersecretarial en la que participarán las Secretarías de Hacienda, Relaciones Exteriores y Turismo, y se invitará a los representantes de la Iniciativa Privada.
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“Hemos enviado al administrador de la FAA un nuevo comunicado por correo electrónico solicitándole una reunión urgente con sus auditores, para revisar conjuntamente con nuestros especialistas las evidencias entregadas. Al mismo tiempo, ahí le expresamos la necesidad de resolver estos asuntos a la mayor brevedad”, precisó la SCT.
El director general de Aeroméxico, Andrés Conesa, afirmó que a diferencia de la sanción aplicada en el 2010 contra la entonces Dirección General de Aeronáutica Civil (DGAC), hoy se tienen "mejores hilos de comunicación y mayor coordinación entre autoridades y aerolíneas, pero será necesario un mayor compromiso para que se reconozca el verdadero valor que genera la industria aérea en el país".
Tiempo y presupuesto
En entrevista con MILENIO, el subsecretario de Transportes de la SCT, Carlos Morán Moguel, insistió en que las autoridades federales cumplieron a cabalidad con las 28 observaciones presentadas por la FAA sobre la seguridad aérea del país y que la baja en la categoría se debió a “falta de tiempo” para revisar todos los documentos.
“Considero que no tuvo tiempo el personal de la FAA para analizar toda la documentación que les entregamos, por lo que hubiera sido pertinente que se aprobara un periodo de gracia o en su caso de pospusiera su análisis hasta el primer semestre del año en curso”, argumentó.
Además consideró que esta baja en la calificación no es algo que pueda adjudicarse solamente a la actuación del gobierno actual, ya que durante la administración anterior se dieron varios descuidos dentro de la Agencia Federal de Aviación Civil (AFAC).
“Es un problema donde evidentemente se descuido, como se descuidaron muchos de estos temas en administraciones anteriores”, afirmó.
Presupuesto
El presupuesto para este año de la AFAC ascendió a 379.7 millones de pesos (mdp), cifra menor en 21.5 por ciento a los 484.1 mdp asignados en 2020 y 26.7 por ciento menos que los 518.2 mdp de 2019, el primer año de la administración actual.
Por separado, controladores aéreos y pilotos en el país coincidieron en que los constantes recortes al presupuesto de la AFAC, antes DGAC, y las consecuencias de esto, son la principal razón detrás de la baja en la calificación de seguridad aérea de México.
José Alfredo Covarrubias, secretario general del Sindicato Nacional de Controladores de Tránsito Aéreo (Sinacta), explicó a MILENIO que desde la auditoria que hizo la FAA a México en 2010, la SCT se comprometió a crear una dependencia autónoma para investigar accidentes e incidentes de aviación, misma que nunca se concretó.
El gobierno federal “intentó” subsanar esta carencia creando comisiones investigadoras cada que ocurre un accidente o incidente aéreo.
Además las normas que rigen la aviación en el país no se han armonizado con las internacionales, en temas como seguridad aérea medicinal, licencias y transporte aéreo.
Covarrubias recordó que si bien se modificó recientemente la Ley de Aviación para cumplir con las exigencias de la FAA, no se actualizaron los reglamentos del sector, como son los de transporte aéreo y aviación.
A esto se suma que hay falta de inspectores en el país que vigilen y analicen los aviones en todas sus modalidades, así como los servicios de talleres y demás aspectos del sector.
De acuerdo con el experto, la norma internacional indica que un inspector de Airbus solamente puede supervisar equipos Airbus, pero en México también se asignan para revisar aeronaves Boeing, así como los servicios de talleres y otros aspectos.
“La principal razón de todas estas fallas es la falta de recursos económicos para la contratación de personal, además de que muchos funcionarios se han ido porque las condiciones laborales no son las mejores”, afirmó.
Presupuesto
El presupuesto para este año de la AFAC ascendió a 379.7 millones de pesos (mdp), cifra menor en 21.5 por ciento a los 484.1 mdp asignados en 2020 y 26.7 por ciento menos que los 518.2 mdp de 2019, el primer año de la administración actual.
Por su parte, Heriberto Salazar, presidente del Colegio de Pilotos Aviadores, dijo que en repetidas ocasiones se ha señalado la falta de inspectores para el proceso de validación de las licencias de los pilotos aviadores.
“Hacen falta inspectores que vigilen y supervisen el proceso cuando un piloto va a un simulador de vuelo como parte de proceso de revalidar su licencia. Ahí el inspector revisa la forma en cómo la persona realiza el trabajo y cómo se comportó”.
Afirmó que también hacen falta inspectores que supervisen vuelos en rutas, es decir cuando personal de la AFAC acompaña a los pilotos en un vuelo comercial a cualquier parte del mundo, para analizar a detalle su trabajo, la forma cómo operan y su capacidad.
lvm / MCM