El gobierno federal considera que el Nuevo Aeropuerto Internacional de México (NAIM) será un negocio rentable para el Estado, por lo que no contempla que sea operado por un tercero o sea concesionado durante su construcción, dijo la subsecretaria de Transporte de la SCT, Yuriria Mascott.
¿Por qué dárselo a un tercero si es sumamente rentable?, cuestionó la funcionaria de la Secretaría de Comunicaciones y Transportes, y destacó que es un proyecto totalmente autofinanciable.
"La construcción es totalmente autofinanciable, es un proyecto que le va a generar mucha rentabilidad a nuestro país," aseguró en el primer Foro del Transporte Aéreo.
Agregó que es importante contar con los recursos del actual Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México para su construcción, considerando que la base de financiamiento es la Tarifa de Uso de Aeropuerto (TUA).
"Si no tuviésemos el aeropuerto actual, si no se tiene la fuerza del Estado que no sólo es un desarrollo aeroportuario, es un desarrollo social y económico para la zona, es una zona que va a requerir conectividad, empleos, y sólo se puede hacer si el Estado lo hace", afirmó.
La concesión puede ser factible para el futuro, ya cuando entre en operación se puede analizar, ahorita por qué dar esa rentabilidad que se tienen para el gobierno a un tercero, cuestionó.
El costo del aeropuerto se calcula en 13 mil 300 millones de dólares, de los cuales se ha contratado cerca de 70 por ciento de su construcción.
Por otra parte, enfatizó que técnicamente no es viable la construcción de dos pistas más en la Base Aérea Militar de Santa Lucía, en el Estado de México, y mantener la operación del AICM. En el espacio aéreo no pueden estar operando los dos aeropuertos, recalcó.
GGA