Adalberto Palma Gómez, presidente de la Comisión Nacional Bancaria y de Valores (CNBV), afirmó que dentro del sector se observan índices de concentración que requieren atención, mientras que en otros casos, falta una mayor expansión, como ocurre con el segmento de la banca popular y la banca social que atienden sectores de la población sensibles y necesitados de servicios.
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Durante su participación en la sesión plenaria inaugural de la 82 Convención Bancaria, Palma dijo que el mercado de valores debe potenciar su quehacer para alentar el ahorro, y la inversión, ampliando el espectro de los inversionistas y, sobre todo, de proyectos productivos y de infraestructura.
El directivo dijo que se impulsará la expansión del sector, alineando los esfuerzos para asegurar que todos los mexicanos, sin importar su situación económica o lugar de residencia, puedan beneficiarse de los servicios del sistema financiero.
“Así, es muy relevante que el objetivo de esta reunión sea conversar sobre el futuro del sistema financiero, a la luz de la voluntad política y administrativa de la Cuarta Transformación en marcha”, afirmó.
Detalló que serán cuatro las líneas bajo las cuales se impulsará el crecimiento del sector durante la presente administración: crecimiento e inclusión; la estabilidad e integridad del sistema; el desarrollo y la competencia y la diversificación en el sector; así como innovación.
“Esta arquitectura hoy puede, sin duda afinarse y mejorarse con el concurso de las entidades del sector, a las que invito a sumarse a este esfuerzo del gobierno y particularmente de los reguladores, en bien del crecimiento económico, el desarrollo del país y del continuo fortalecimiento del sistema financiero”, dijo.
Afirmó que existe la oportunidad para reorientar la evolución de las instituciones, los mercados y los instrumentos para que, de manera progresiva, el entorno financiero cumpla mejor sus funciones.
“Deben idearse nuevas formas de hacer negocio, rentable y transparentemente, con una intermediación financiera más eficiente y eficaz, con los nuevos instrumentos tecnológicos creativos que están surgiendo, sin bajar la guardia en temas como la ciberseguridad, prevención de fraudes y el lavado de dinero”, dijo.
Puntualizó que se requiere de la innovación, “desde ambos lados del mostrador, del regulado y del regulador, con creatividad y compromisos claramente establecidos entre las partes involucradas y, así, apoyar decisivamente el crecimiento económico y el bienestar social en el país, que no pueden ser parte de una falsa dicotomía”.
Palma Gómez se pronunció por una regulación diferenciada que reconozca los diferentes modelos de negocio que convergen en el sistema, pues así se enfocarían mejor los esfuerzos del regulador y se promovería el desenvolvimiento natural de mercados, además de ampliar de modo más efectivo la inclusión financiera y apoyar la actividad productiva de medianos, pequeños y micro empresarios.
“Dadas las fortalezas existentes en el sistema, tenemos la oportunidad de mejorar las condiciones estructurales, funcionales y operativas de nuestro sistema financiero: esto es, acordar una arquitectura del sistema, repito, alineada a los objetivos de crecimiento y bienestar”, resaltó.
lvm