Siria anunció que devaluó su moneda en 44 por ciento, así como una nueva tasa de cambio, poco antes de la entrada en vigor de sanciones estadunidenses destinadas a privar de fondos al gobierno de Bashar Assad.
En las sanciones de Estados Unidos están incluidas figuras encumbradas del gobierno sirio cuyos nombres serán anunciados en las próximas horas. Son las sanciones más duras impuestas hasta ahora contra Siria, prohibiendo todo contacto con funcionarios e instituciones públicas, y toda participación en la reconstrucción del país.
La economía siria está severamente deteriorada, los precios se han disparado y la libra siria ha caído en picada debido en parte a temores de que las sanciones aislarán aun más al país ya devastado por la guerra civil.
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Expertos advierten que las sanciones asestarán un duro golpe a la economía de un país donde el 80 por ciento de la población vive en pobreza, según la ONU. El gobierno sirio las tilda de "terrorismo económico".
Esta semana la libra siria cayó a un récord de 3 mil 500 por dólar en el mercado negro, comparado con 700 por dólar a inicios de año. Han empezado a escasear productos básicos como arroz, azúcar y medicinas y muchos habitantes del país han empezado a almacenar víveres previniendo un incremento en el precio.
El Banco Central de Siria anunció la devaluación de la moneda el miércoles con lo que la tasa de cambio ascendió de 704 a mil 256 libras por dólar, a fin de reducir la presión sobre el mercado negro y estimular el uso de la tasa de cambio oficial. La tasa de cambio en el mercado negro, según mensajes colocados en las redes sociales, asciende a 2 mil 825 libras por dólar.
El colapso económico es un severo desafío para Assad, quien sigue en el poder pese a más de nueve años de guerra civil pero cuyo país ha sido totalmente devastado por el conflicto. Las penurias económicas han provocado protestas en zonas controladas por el gobierno, donde algunos manifestantes han llegado a exigir su derrocamiento.
Las sanciones "tratan de poner al ciudadano sirio en contra del gobierno, son una incitación al caos y a la discordia", expresó Safwan Qurabi, un legislador sirio. Aseguró que el gobierno está tomando medidas, como la flexibilización de la economía, para encarar las sanciones.
Ziyad Ghoussen, un periodista sirio especializado en temas económicos, vaticinó que las sanciones agravarán las penurias de la población, dificultando el acceso a productos básicos y aumentando la pobreza en el país.
srgs