Carlos Slim Helú, presidente honorario vitalicio de Grupo Carso, defendió su negocio de telecomunicaciones mexicano, Telmex, de la opinión de los Premios Nobel de Economía de 2024, quienes criticaron la forma en que adquirió Teléfonos de México.
"Son unos imbéciles, ponen las cosas sin saber qué escriben", dijo en conferencia con medios.
Daron Acemoglu, Simon Johnson y James A. Robinson fueron los ganadores del Premio Nobel de Economía 2024 por sus estudios sobre “cómo se forman las instituciones y cómo afectan la prosperidad”.
Según la obra "Por qué fracasan las naciones", los Premios Nobel describen el modelo de negocio de Telmex, que aseguran, perdió su valor y potencial al privatizarse.
El empresario mexicano de origen libanés refirió que tras la adquisición de algunas acciones de la compañía, se logró un cambio en los primeros tres años, por lo que si bien reconoció que "son unos estudiosos de la economía", dijo que ellos "nunca han hecho empresa, nunca han pagado una nómina".
"Nosotros ya le mandamos un estudio completo y ya nos lo ponen y quedaron de ya no ponerlo, del online ya lo quitaron", refirió sobre los comentarios que en el documento hacen referencia a la empresa.
Slim destacó que el mundo vive una época difícil, un cambio en la civilización, lo que genera problemas agudos.
"Está pasando un momento en que viene un cambio de fondo porque no es posible que haya dependencias así de simplistas y esos son los Premios Nobel", dijo.
Así inició Slim en Telmex
De acuerdo con el empresario, las telecomunicaciones en México empezaron en 1876, con la instalación de seis líneas, las cuales iban de una comandancia a las oficinas de la policía.
"Las telecomunicaciones, históricamente, fueron privadas y extranjeras" durante 15 años, recordó.
Manifestó que cuando niño había dos empresas privadas de telecomunicaciones, ETT y Ericsson, las cuales contaban con dos conexiones, dando paso posteriormente a un acuerdo para que utilizaran una sola red para toda la población.
Además, en 1958 se inició la nacionalización de la telefonía en México, una empresa mxicana y privada.
Slim manifestó que en ese tiempo existía Telmex, Telefónos de México, con 48 por ciento de acciones preferentes del gobierno, mientras que los privados tenían el restante.
Así, la compañía estuvo a manos de los privados, de 1958 a 1972, quienes invirtieron en Telmex 65 millones al año.
Sin embargo, de 1973 a 1989, con 51 por ciento en manos del gobierno, se invertían 330 millones de dólares en al año; "por eso había esos retrasos y no había modernidad", aseguró el empresario.
Posteriormente, el gobierno decidió privatizar o vender más del 20 por ciento de acciones que tenía de ése 51 por ciento de Telmex, con un valor superior 7 mil 270 millones de dólares en 1990; Carlos Slim ganó la participación accionaria con una propuesta de más de 8 mil 600 millones de dólares.
"El primer año invertimos mil 641 millones de dólares en Telmex", aseguró.
MRA