El Departamento de Trabajo de Estados Unidos informó que el número de personas que presentó nuevas solicitudes de subsidios por desempleo bajó la semana pasada, mientras las condiciones del mercado laboral siguen siendo ajustadas, aunque se está produciendo una cierta desaceleración.
En la semana que terminó el 18 de junio, las solicitudes iniciales de subsidios estatales por desempleo cayeron en 2 mil, a una cifra desestacionalizada de 229 mil. Economistas encuestados por Reuters habían previsto 227 mil solicitudes para la última semana.
Las solicitudes de subsidio por desempleo se han mantenido relativamente estables desde que en marzo cayeron a 166 mil, su nivel más bajo en 53 años, en medio de señales de enfriamiento del mercado laboral.
Ha habido informes de recortes de empleos, sobre todo en los sectores de la tecnología y la vivienda, y este último está experimentando una moderación de la actividad a medida que aumentan las tasas hipotecarias en respuesta a las crecientes expectativas de inflación y a las agresivas subidas de las tasas de interés de la Reserva Federal.
Sin embargo, el mercado laboral en general sigue ajustado. A finales de abril había 11.4 millones de puestos de trabajo vacantes, con casi dos vacantes por cada desempleado. Los economistas afirman que las solicitudes de subsidios tendrían que superar los 250 mil para ayudar a equilibrar la oferta y la demanda de mano de obra y controlar la inflación salarial.
El banco central estadunidense subió la semana pasada su tasa de interés oficial en tres cuartos de punto porcentual, su mayor alza desde 1994. La Fed ha aumentado su tasa de interés de referencia a un día en 150 puntos básicos desde marzo.
Los esfuerzos de la Fed por amortiguar la demanda en el mercado laboral y la economía en general están avivando los temores a una recesión el próximo año.
El presidente de la Fed, Jerome Powell, dijo a legisladores el miércoles que el banco central no está tratando de diseñar una recesión para frenar la inflación, sino que está plenamente comprometido con el control de los precios, incluso si al hacerlo se corre el riesgo de una recesión económica.
Los recientes datos de ventas minoristas, vivienda y manufactura sugieren que la economía está perdiendo velocidad después de que pareció haberse recuperado de la caída del primer trimestre, impulsada principalmente por un déficit comercial récord.
Los datos de la semana pasada cubren el periodo durante el cual el gobierno encuestó a los establecimientos para el componente de nóminas no agrícolas del informe de empleo de junio. Las solicitudes aumentaron moderadamente entre los periodos de encuesta de mayo y junio.
La economía añadió 390 mil puestos de trabajo en mayo. El informe de solicitudes también mostró que el número de personas que reciben prestaciones tras una semana inicial de ayuda aumentó en 5 mil, hasta mil 315 millones, durante la semana que terminó el 11 de junio.
Los datos de la próxima semana sobre las denominadas solicitudes continuas arrojarán más luz sobre el informe de empleo de junio.
srgs