Verter agua hirviendo y esperar a lo mucho cinco minutos es todo lo que se necesita para preparar una sopa instantánea, un concepto que nació en Japón tras el fin de la Segunda Guerra Mundial para paliar la hambruna ante la escasez de alimentos.
Las hay en diferentes presentaciones y sabores, pero todas tienen como común denominador que son fáciles de preparar y de conservar; y sin embargo, esta no es la razón de su éxito atronador en el mercado mexicano.
En el país cada mes se consumen 7.5 millones de cajas de sopas instantáneas, lo que equivale a 100 millones de unidades o mil 500 contenedores; es decir, en promedio el mexicano las ingiere de dos a tres a veces por semana, un gran potencial del negocio que está atrayendo a marcas de todas partes del mundo.
Una de estas marcas que han incursionado en la categoría es Sopa Fan’s, fabricada en China y distribuida en México por la empresa de diseño y gestión de la cadena de suministro maxiaNET, la cual busca “romper las reglas” que han estado vigentes durante años en este segmento de mercado.
Tropicalización como modelo de negocios
El arribo de Sopa Fan’s al mercado mexicano no fue fortuito ni mucho menos improvisado, antes de que el primer cargamento de sopas instantáneas llegara al país la marca ya tenía diseñado todo un plan de negocios para hacerse de un lugar en los anaqueles minoristas.
“Representamos la segunda generación de sopas instantáneas en el mercado, y la experiencia muestra, que la segunda generación, siempre supera y mejora a la primera”, subrayó Eric Gomez, CEO de maxiaNET, en entrevista para MILENIO.
Su estrategia para revolucionar las condiciones de mercado se basa en tres categorías: innovación, precios y sabor. La primera abarca una variedad de presentaciones y tamaños, incluyendo un tenedor reutilizable y envases de cartón de 85, 110 y 140 gramos, además se preparan para incursionar en el formato en sobre.
En cuanto a los precios, al no depender de los mercados globales para el suministro debido a que la marca tiene sus propios campos de trigo y producción de empaques, maxiaNET gestiona una estrategia regional que suaviza la volatilidad de las divisas y la inflación.
Pero su gran apuesta es el sabor, donde el propio Eric Garcia participó en el diseño junto a un japonés y un chino. “Queríamos empezar con un sabor mexicano, entonces conociendo el mercado y los sabores, mandé bastantes muestras y ellos diseñaron varios sabores. Los probé con mi equipo y rechazamos algunas, pero al final quedamos con sabores que todos dijeron ‘son buenísimos’”, relató.
De esta forma se decidieron por los sabores de camarón y camarón picante; pollo y pollo picante; res y res picante; champiñones y champiñones picantes, así como spicy noodles, entre otros. Como dice el dicho popular "el amor entra por el estómago", es ésta la clave detrás del éxito de este tipo de alimentos en el país.
Además cada seis meses lanzarán nuevas presentaciones y sabores mexicanos, mismos que no solo venderán en el país, sino en toda Latinoamérica y hasta Canadá. Para materializar esta ambiciosa estrategia trabajan de la mano con el segundo fabricante más grande de sopas en China.
“China representa más o menos el 40 por ciento del consumo global en esta categoría. Entonces estamos trabajando con expertos (...) ellos son los que realmente inventaron el proceso de este producto”, añadió.
Apoyo en tienditas
Sopa Fan’s no busca competir directamente con las grandes marcas de la categoría como Maruchan y Nissin, sino concentrarse en mercados más pequeños y menos concurridos, como vecindarios y minoristas regionales.
Esto, dado que el segmento poblacional que más adquiere estos alimentos son las amas de casa, seguido de empleados y estudiantes.
“Tomaremos los mercados que fueron olvidados por los líderes del segmento, presentando calidad, innovación, además de un trato personalizado para nuestros socios comerciales, quienes obtendrán mayores ganancias y menor merma”, apuntó el CEO de maxiaNET.
Para ello han lanzado su propia ruta a detalle en Tijuana, Mexicali, Tlalpan e Iztapalapa. “Vamos más por un modelo de llegar a la gente directamente, a empezar con las las orillas por por decirlo y no no ir directamente”, abundó.
Su meta es crecer la categoría por tres, con la intención de cubrir a finales de año 17 de los 32 estados de la República.
Asimismo, están en busca de emprendedores que quieran agregarse al negocio comprando cajas de sopas para venderlas en sus comunidades. De esta forma buscan crear un demanda y una base de fans de su producto, y el resto dejárselo a la dinámica del mercado.
La receta
Los ingredientes de los que están hechas las sopas instantáneas varían dependiendo de la marca, aunque generalmente los fabricantes usan harinas, adicionan potenciadores de sabor, aceites vegetales y/o grasas animales, derivados de soya, extracto de levadura, azúcares (tales como azúcar, glucosa, fructosa o lactosa), sal, antioxidantes sintéticos (como TBHQ), conservadores y colorantes, de acuerdo con la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco).
Algunas pueden llegar a tener hasta más de 30 ingredientes, aunque de todos el sodio es el menos saludable, razón por la cual “si se consume este tipo de alimentos de forma habitual es probable que derive en enfermedades crónico-degenerativas tales como diabetes, obesidad e hipertensión, por causa de una mala alimentación”, advirtió el organismo público descentralizado en la Revista del Consumidor de octubre de 2021.
Citando al doctor Braden Kuo, del Hospital General de Massachusetts, la procuraduría explicó que la razón por la que se puede dificultar la digestión de este tipo de alimentos se debe principalmente a la forma en que se procesa la harina, así como por el contenido de humedad y grasa.
AMP