Stanley Ho, el rey del juego de Macao, quien levantó un imperio comercial desde cero en la antigua colonia portuguesa y se convirtió en uno de los hombres más ricos de Asia, murió a los 98 años en un hospital de Hong Kong, ciudad en la que también nació, informó su familia.
El extravagante magnate, al que le encantaba bailar y aconsejaba a sus allegados que evitaran las apuestas, dirigió uno de los negocios de juego más lucrativos del mundo a través de su empresa insignia, SJM Holdings Ltd, valorada en unos 6 mil millones de dólares.
Ho supervisó la transformación de Macao en el centro de casinos más grande del mundo, superando a Las Vegas, y mantuvo un monopolio hasta 2002, cuando el enclave dio licencia a otros cinco operadores de casinos.
"En Hong Kong, el Dr. Ho había sido alguien que tenía mucho peso, era muy respetado (...) Esperamos seguir los pasos de nuestro padre", dijo su hija Pansy a la prensa.
Nacido en Hong Kong, Ho tuvo cuatro esposas y 17 hijos conocidos. Se vio obligado a reestructurar su negocio después de que en 2012 estallara una batalla legal en el seno de la familia por la fortuna familiar, que Forbes había calculado en 2.000 millones de dólares dos años antes.
MRA