La automotriz Stellantis invertirá 33 millones de euros (lo que equivale a casi 35 millones de dólares) en dos centros globales de pruebas de ingeniería avanzada.
En un comunicado, la empresa señaló que el objetivo de esta inversión es respaldar la estrategia de conseguir un mejor rendimiento en sus vehículos eléctricos y de obtener un desempeño mayor en su tecnología de conducción autónoma.
Entre los planes de la compañía está el mejorar su centro de seguridad en Orbassano, ubicado en Turín, Italia, el cual alberga cuatro pistas de prueba con cuatro puntos de impacto, así como la capacidad para poder realizar las respectivas evaluaciones de los autos eléctricos.
También está ampliando el túnel de viento de Auburn Hills en Michigan, Estados Unidos, incorporando tecnología de suelo móvil, la cual simula los desplazamientos por carretera y ofrece una medición más precisa de la aerodinámica de los vehículos.
"Nuestros avanzados centros tecnológicos de todo el mundo llevan a cabo el trabajo que hará que los vehículos Stellantis del futuro sean líderes del sector en capacidad, rendimiento y seguridad", comentó Harald Wester, jefe de ingeniería de Stellantis.
Asimismo, consideran que estas inversiones amplían las capacidades globales de la firma, aceleran su transformación hacia una compañía tecnológica de movilidad sustentable, la cual impulsan hacia los objetivos de su plan Dare Forward 2030.
El plan Dare Forward consiste principalmente en alcanzar 100 por ciento de ventas de la combinación de vehículos eléctricos en Europa, así como también 50 por ciento de las ventas combinadas en Estados Unidos para 2030.
KL