Luego de que el gobernador de Tabasco, Adán Augusto López, presentó al Congreso del Estado la iniciativa para prohibir la venta de alimentos y bebidas con alto contenido calórico a menores de 18 años, e imponer un impuesto adicional a la venta de bebidas energizantes y saborizadas, el sector privado exhortó al gobernador detener la votación de la iniciativa.
En un comunicado conjunto entre las cúpulas empresariales del estado y nacionales, afirmaron que el proyecto ha sido procesado abruptamente en comisiones, y se prevé votar lunes sin ninguna consideración de los sectores afectados, ni el impacto que tendría en la sociedad tabasqueña.
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"Hacemos un exhorto al gobernador y al Congreso del Estado a detener la votación de esta ley prevista para el lunes 17 de agosto a las 11 am, para poder escuchar las posturas de los múltiples sectores que serían afectados. Abandonemos las prácticas del pasado que prometieron eliminar y busquemos juntos soluciones", resaltaron.
El sector privado expuso que está propuesta afectará directamente el bolsillo de miles de tabasqueños, quienes no solo perderían una fuente digna de ingreso, sino que se incrementan los impuestos en medio de una crisis sin precedentes, "rompiendo así el compromiso del presidente Andrés Manuel López Obrador".
Destacó que la propuesta limita la venta de alimentos y bebidas no alcohólicas como frutas deshidratadas, lácteos, cárnicos, productos a base de cereal, entre otros, en cualquier tiendita, restaurante, taquería, supermercado.
"Condición que no solo no resolverá el problema de sobrepeso y la obesidad, sino que incentiva el mercado informal e impactará negativamente a las familias de Tabasco, quienes dependen de su venta, distribución y comercialización", advirtió la iniciativa privada.
Destacó que los impuestos a bebidas saborizadas, ya han probado su ineficacia a nivel federal, al no servir para reducir el consumo, ni para financiar programas de educación y salud.
"Solamente afectaron a la ya castigada economía familiar, y provocó el cierre de pequeños comercios, a costa de aumentar las arcas gubernamentales de sexenios pasados", resaltó.
En ese sentido, señaló que en virtud de la complejidad del problema, "consideramos que para su prevención y atención se requiere de una estrategia coordinada y multisectorial, que incluya al gobierno, a la sociedad y a todos los sectores productivos".
lvm