Tesla planea impulsar la producción mundial de sus vehículos eléctricos de mayor venta, el Model Y y el Model 3, en el cuarto trimestre, y elevarla aún más en 2023 en la medida en que las nuevas fábricas en Austin y Berlín aceleren su actividad, según planes internos revisados por Reuters.
La previsión de producción de Tesla, si se cumple, pondría al fabricante de vehículos eléctricos cerca del tamaño de automotriz de lujo alemana BMW a finales de 2023.
Tesla y su presidente Elon Musk tienen un registro de fijarse objetivos que la compañía no siempre cumple. En abril, por ejemplo, Musk dijo que Tesla podría alcanzar un crecimiento del 60 por supuesto en las entregas. En julio, la empresa redujo su meta a un 50 por supuesto para este año.
El ambicioso objetivo se alcanzó a pesar de los persistentes riesgos en la cadena de suministro, la ralentización de la economía, el aumento de la competencia y la caída de la cartera de pedidos de Tesla.
Pero la previsión, que abarca los próximos cuatro trimestres consecutivos, establece un ambicioso objetivo de producir casi 495 mil Model Y y Model 3 en el cuarto trimestre de este año. Los dos modelos representan alrededor del 95 por ciento de la fabricación de Tesla.
Los planes de producción harían que Tesla supere el crecimiento previsto del mercado mundial de automóviles por un factor cercano a 10 en 2023, con un aumento de la producción de más del 50 por ciento en el año.
Reuters ha confirmado el objetivo de producción mundial del Model Y y el Model 3 con dos personas con conocimiento de las proyecciones, que hablaron a condición de que no se mencionara sus nombres porque la previsión es privada.
Tesla no respondió inmediatamente los pedidos de comentarios.
La expansión de Tesla ha sido costosa. A finales de mayo, Musk había dicho que las nuevas fábricas en Texas y Alemania estaban perdiendo miles de millones de dólares y las comparó con "gigantescos hornos de quemar dinero".
Se espera que Tesla anuncie cifras de entregas y producción del tercer trimestre incluso el sábado. Las expectativas son que se haya recuperado con fuerza de la ralentización del trimestre anterior, cuando la producción en Shanghai se vio afectada por las medidas para controlar el covid-19.
srgs