La transición hacia energías renovables como la solar y la eólica será fundamental para reducir la dependencia a los combustibles fósiles y diversificar la economía, pero este proceso requerirá de importantes inversiones en infraestructura y tecnología, dijo el director ejecutivo de WRI México, José Luis Samaniego.
El Instituto de Recursos Mundiales (WRI) añadió que otro de los retos para la nueva administración es fortalecer a las empresas estatales, Petróleos Mexicanos (Pemex) y la Comisión Federal de Electricidad (CFE).
Todo esto al mismo tiempo que se promueva la sustentabilidad, se acelere la mejora tecnológica y se eviten prácticas que dañen el medio ambiente, por lo que será un delicado equilibrio que Claudia Sheinbaum deberá manejar, indicó Jose Luis Samaniego.
"Ante el imperativo de lograr una mayor equidad y la necesidad global de estabilizar el clima y detener la extinción biológica en curso, el período 2024-2030 es, según la ciencia, la última ventana para alinear la política económica y fiscal con las políticas de desarrollo ambiental y social, dentro del umbral de seguridad climática de 1.5 a 2 grados centígrados".
El director ejecutivo añadió que una buena noticia es que en México existe un amplio potencial para reorientar el camino del desarrollo y mejorar las condiciones de los grupos vulnerables, generar más empleos, reducir la pobreza energética y mejorar el bienestar tanto en las zonas urbanas como en las comunidades rurales, todo al mismo tiempo.
También dijo que enfrenta un aumento en la frecuencia e intensidad de eventos climáticos extremos como huracanes, sequías e inundaciones. Y los efectos lentos pero 'implacables' del aumento del nivel del mar y la disminución de la disponibilidad de agua.
"Claudia Sheinbaum debe tomar medidas para mitigar estos efectos en las poblaciones y medios de vida vulnerables y fortalecer la adaptación al cambio climático".
Comentó que para cumplir los compromisos internacionales para reducir las emisiones de gases de efecto invernadero, como los establecidos en el Acuerdo de París, requerirá políticas efectivas y una transición hacia energías más limpias.
MRA