El primer avión de Europa hacia China tras el confinamiento por el coronavirus SARS-CoV-2, que causa la enfermedad covid-19, emprendió su vuelo con 200 pasajeros a bordo y partió desde el aeropuerto alemán de Fráncfort.
Entre los pasajeros había empleados del grupo automovilístico alemán Volkswagen y sus familias, que vuelven a China para reanudar su trabajo de control de calidad en cadenas de montaje de la filial Audi, la tarea que desempeñaban hasta febrero, cuando tuvieron que abandonar el país.
A la llegada al aeropuerto de Tianjin "esperamos controles exhaustivos, de fiebre, de diagnóstico de coronavirus, tests de anticuerpos, y luego un periodo de cuarentena de 14 días", explicó a la AFP uno de esos trabajadores, Bernd Poth.
"No nos preocupa la seguridad, pero sí la cuarentena, no sabemos muy bien lo que nos espera", explicó otro empleado de una empresa del sector aeronáutico, Alexander Ophoven.
Hasta prácticamente el último minuto "no estaba claro si este vuelo iba a salir o no", explicó.
China decidió esta misma semana aumentar el número de vuelos de llegada al país, que estaba situado en un máximo de 407 a la semana.
Antes de la crisis sanitaria, los aeropuertos chinos recibían más de 9 mil vuelos semanales.
"Nos tomó tres semanas organizar este primer vuelo", explicó a la AFP Jens Hildebrandt, de la Cámara de Comercio alemana en el norte de China.
MRA