En Tulancingo, 27 % de negocios ha cerrado definitivamente debido a las restricciones sanitarias

Canaco señala que debido a la medidas, que han seguido de manera puntual, se han limitado para acrecentar sus ventas y fortalecer la reactivación económica y son los compradores los que muchas veces no se empatizan con la situación.

Papelerías y tiendas de tagalos y bisuterías han tenido que cerrar. | Andrés Lobato
Elizabeth Hernández
Pachuca /

Un estimado de 27 por ciento de negocios y comercios en Tulancingo han cerrado sus cortinas de forma definitiva, en consecuencia de las afectaciones que ha traído consigo la pandemia y las restricciones sanitarias que se les han aplicado al sector para detener los contagios de covid-19.

Así lo informó Alejandro de la Concha Ortiz, presidente de la Cámara de Comercio, Servicios y Turismo (Canaco-Servytur) en Tulancingo, quien detalló que entre los establecimientos que han tomado esta decisión, son tiendas de regalos, fotografía, bisutería y papelerías.


"El cierre que se presentó en enero no va avanzar, porque las unidades económicas lograron entender las medidas restrictivas para contener la pandemia, las implementaron, las sostuvieron y las siguen manteniendo.
"Nosotros creemos que no va a haber más cierres de negocios. En lo que es Tulancingo y en la región estamos aplicando las medidas de pandemia auxiliados por la Secretaría de Salud, que son los que nos marcan y nos rigen los horarios, los aforos y medidas que debemos de mantener”, explicó.

Dijo que las medidas sanitarias que se le han impuesto al sector comercial y productivo los ha limitado para acrecentar sus ventas y fortalecer su reactivación económica y son los compradores los que muchas veces no se empatizan con la situación.

"Para impulsar nuestras ventas se han tenido que implementar estrategias como el envío a domicilio sobre todo en el ramo alimenticio, nos ha ayudado mucho, incluso hay quienes han prosperado en sus negocios”, detalló.

En esta línea, manifestó que continuarán acatando las medidas sanitarias y se mantendrán atentos al semáforo de riesgo epidemiológico, porque será la forma en cómo van a salir adelante, pues aseguró que si el semáforo cambia de color y disminuyen los contagios representa un aliciente para el sector comercial.

“El cambio de semáforo es un ánimo de que podemos salir adelante y continuar todos con los negocios que mantuvimos abiertos en enero de este año hasta el próximo 2022”, dijo.

Finalmente, comunicó que en el censo de noviembre de 2020, se registraron cerca de 3 mil 300 unidades económicas en la región que comprende Singuilucan, la Otomí-Tepehua y municipios aledaños, como Acatlán y Huasca de Ocampo, por lo que espera que este número se incremente el próximo año y no se presenten más cierres definitivos.

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