La Organización Mundial de Turismo (OMT) informó que durante el año pasado la llegada de viajeros extranjeros creció 3.8 por ciento, lo que reflejó una desaceleración, ya que en periodos anteriores mostró un comportamiento mayor a 5 por ciento.
En su reporte, la OMT dio a conocer que este escenario se debió a la incertidumbre en torno al Brexit, la quiebra de la aerolínea Thomas Cook, las tensiones geopolíticas, sociales y la ralentización de la economía global.
De acuerdo con datos del organismo durante 2018, el sector registró un incremento de 5.6 por ciento, mientras que un año previo el aumento fue de 7.2 por ciento.
“Esta ralentización afectó sobre todo a las economías avanzadas, y en especial a las regiones de Europa y Asia y el Pacífico”, indicó.
Para el futuro, se prevé un crecimiento de entre 3 y 4 por ciento en 2020, una perspectiva que muestra un prudente optimismo, indicó la OMT.
En un entorno de perspectivas económicas a la baja, de tensiones en el comercio internacional, de inestabilidad social y de incertidumbre geopolítica, la industria turística sigue adelantándose a la economía mundial y exige no sólo crecer, sino crecer mejor, añadió el organismo.
La OMT informó que en el continente Americano 2019 se dio un incremento de 2 por ciento en la llegada de turistas extranjeros, con lo cual igualmente se dio una desaceleración, ya que en periodos anteriores las cifras se ubicaron mayores a 4 por ciento.
De acuerdo con el reporte del organismo, en 2016 el incremento en esta región, donde se incluye a México, registró una alza de 3.7 por ciento; en 2017 de 4.7 y en 2018, de 2.4 por ciento.
MRA