Uber: emplear a choferes nos sacará de 50 ciudades

Diálogo. Busca parlamento abierto en 2023 para dar casos de solución como en otros países; la app tiene 200 mil socios y atiende 40 mil restaurantes en 70 urbes de México

Los conductores captan gran parte de lo que se cobra por viaje, dice la firma. MAURICIO RUMAN
Jesús H. Hernández
Ciudad de México /

La plataforma de movilidad Uber advirtió que habrá graves riesgos al empleo y la economía de varios sectores en el país si el Congreso aprueba la iniciativa de ley que pretende que los choferes sean empleados de la app, por lo que impulsará un parlamento abierto con legisladores, expertos y sociedad a inicios de 2023.

En México la empresa opera en 70 urbes y asocia a más de 200 mil de los casi medio millón de conductores en la industria, pero de “emplear” a los socios, sus costos se incrementarán por arriba de 30 por ciento.

Nicolás Sánchez, director de Asuntos Gubernamentales y Políticas Públicas de Uber México, explicó la mayor parte de las tarifas van al asociado, y lo que recibe la empresa es solo una comisión, por lo que una medida de este tipo causará que las tarifas se vayan al doble, y “mucha gente dejará de usarlo. Nuestras proyecciones son que tendríamos que salir de 50 ciudades”.

Sánchez apuntó que los márgenes en el sector son muy bajos, pues el grueso de las tarifas que paga el usuario por la transportación se va al socio conductor; un aumento en el gasto se reflejará al consumidor, “lo que resultaría muy probablemente en un aumento del doble o más en las tarifas”.

Para Daniel Colunga, director general de Uber Eats México, también habría un fuerte daño a la industria restaurantera, pues “actualmente representamos hasta 20 por ciento de sus ingresos, sobre todo de los pequeños y medianos que se apoyan en la plataforma para sus ventas”.

“Arrancamos en 2016 con 500 restaurantes y ahora son más de 42 mil los que tenemos afiliados a la plataforma”, contó Colunga.

En cuanto a los servicios de delivery, un aumento en las tarifas del servicio puede crear “incluso un efecto inflacionario”.

Nicolás Sánchez señaló que tuvieron reuniones y acercamientos con la Secretaría del Trabajo, legisladores y hasta con la Jefatura de Gobierno capitalina. “Estamos de acuerdo en que hay que buscar una solución y por ello presentamos diferentes modelos que se adoptaron en el mundo”.

En algunos países se crearon fondos privados para que los socios tuvieran acceso a servicios de salud y seguridad social; mientras que en países como Chile, ante el debate dividido del congreso sobre si se debían emplear o no, se creó un sistema mixto donde el socio elige si decide tomar un régimen de empleado o vive como independiente.

“En España con la llamada “Ley Rider” se adoptó el modelo de empleabilidad sin consultar a las empresas y las consecuencias han sido desastrosas, De la noche a la mañana 70 por ciento se quedaron sin posibilidades de ingresos porque no se pudieron reinstalar como base laboral”. afirmó Sánchez.

De hecho, en España, Uber reconoció que solo en su plataforma de reparto se despidió en 2021 hasta 4 mil 4 “empleados”, según consignaron ayer algunos medios locales.

Paralelamente un informe publicado ayer por el Abogado General de la UE considera que la norma que en Barcelona limitó la operación de los transportes de aplicación, como Cabify o Uber, a solo uno por cada 30 taxis, “viola la libertad de establecimiento” en el marco del tratado de funcionamiento de la Unión Europea.

Casi una década de inversión

La empresa refirió que desde su llegada a México en 2013, han invertido alrededor de mil 500 millones de dólares en el país, buena parte de ellos para dar incentivos a los socios conductores afiliados a la plataforma.

Solo en 2021 usaron 30 millones de dólares en dar apoyos a choferes, como seguros, apoyos para adquisición de autos o pagos extra que se ofrece a los socios para que estén más tiempo conectados a la plataforma, afirmó Juan Pablo Eiroa, director general de Movilidad de Uber México.

Según Eiroa, la presencia de las plataformas de movilidad han ayudado a formalizar el mercado de transporte privado, pues a través de las retenciones que se hacen a los conductores y socios de reparto de Uber y los propios impuestos de la empresas se entregó al fisco más de 200 millones de dólares.

Para 2023 la empresa intensificará su inversión en seguridad y confiabilidad tanto de sus unidades de movilidad y reparto, además de que buscarán aumentar la base de socios para que puedan ofrecer una mayor oferta, con lo cual “podríamos ofrecer tarifas más bajas a los usuarios".


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