UBS ha completado la adquisición de emergencia de su rival local Credit Suisse, creando un banco suizo gigante con un balance de 1.6 billones de dólares y mayor presencia en la gestión de patrimonios.
La adquisición supone la mayor operación bancaria desde la crisis financiera mundial de 2008. El consejero delegado de UBS, Sergio Ermotti, y su presidente, Colm Kelleher, afirmaron que "este es el comienzo de un nuevo capítulo", en una carta abierta publicada en la prensa suiza.
El grupo gestionará 5 billones de dólares en activos, lo que dará a UBS, el mayor gestor de patrimonios del mundo, una posición de liderazgo en mercados clave que, de otro modo, habría necesitado años para crecer en tamaño. La fusión también pone fin a 167 años de historia de Credit Suisse, empañada en los últimos años por escándalos y pérdidas.
Los dos bancos emplean conjuntamente a 120 mil personas en todo el mundo, aunque UBS ya ha dicho que recortará puestos de trabajo para aprovechar las sinergias y reducir costes.
MRA