La Comisión de Capacitación y Organización Electoral alertó que la falta de uniformes para los Capacitadores Asistentes Electorales (CAE) que está en campo buscando funcionarios de casilla, los pone en riesgo en zonas de mayor incidencia delictiva por falta de prendas que los identifiquen como trabajadores del INE, ante los retrasos en la producción provocados por errores administrativos.
En la comisión se informó que además del error de origen de las nuevas áreas administrativas del INE que avalaron la entrega de chamarras el 2 de marzo, Supervisores Electorales y Capacitadores Asistentes Electorales salieron a las calles el 9 de febrero; el proveedor informó que tendrá un nuevo retraso y no podrá entregarlas ni siquiera en esa fecha.
Por lo que se tuvo que invertir dos millones 106 mil 800 pesos para 21 mil 68 playeras urgentes que permitieran darles una prenda de identificación al personal que está en campo.
La directora Ejecutiva de Capacitación Electoral y Educación Cívica señaló que si bien este retraso no pone en riesgo el proceso electoral, sí la integridad del personal en campo que llega a zonas con niveles de violencia.
“Si bien es cierto que no está comprometida la integración de las mesas directivas de casilla, sí está comprometida la integridad de nuestro personal porque en algunos casos no están recibiéndonos con la libertad o la confianza que se pudiera dar en otros momentos”.
La consejera Dania Ravel exhibió que esto se complica porque el proveedor de chamarras ya informó que ni siquiera podrá entregarlo en tiempo, adicional a que por un error administrativo se pidieron para un mes más tarde del plazo en que se requería, por lo que pidió que como medida preventiva, se pida usar las playeras que se hicieron como solución exprés.
“Que se informe que los CAES tienen que usar esa playera porque han estado saliendo a campo sin playera, puede ser incómodo en lugares donde haga frío porque se la tienen que poner encima de sus chamarras, pero es la manera en que la ciudadanía puede identificarlos”.
Reportó que ya se tiene información de casos en los que personas seleccionadas deciden no abrir la puerta al personal electoral porque no está debidamente identificado.
“El punto es que las y los CAES no están realizando su trabajo en condiciones óptimas. La ciudadanía no siente la confianza de abrirle la puerta a una persona que no se e identificada como debería de estar el personal. Es una cuestión que podría llegar a entorpecer, hay casos aislados pero la idea es que no se multipliquen y lo podamos revertir. También es seguridad porque están haciendo recorridos y pueden llamar la atención de algunos grupos que no estén en el marco de la ley y puedan sufrir algún daño en su integridad física porque no están identificados”, señaló Ravel.
A lo que le consejero Jaime Rivera lamentó que sea un hecho estos retrasos y que ya estén afectando la labor del personal de campo “por cuestiones administrativas” al haber solicitado tardíamente la entrega.
“En la parte sustancial, no debemos soslayar una condición desfavorable para el trabajo de los CAES y los efectos negativos que podrían estar teniendo en algunos casos. Si no consideráramos ningún efecto negativo, los uniformes, estas prendas de identificación, parecerían superfluos o innecesarios y no es así. No es sólo por hacer ver la identidad del INE sino por sentido común y ante la inseguridad grave que hay en México, se considera importante esas prendas de identidad para facilitar la confianza de las personas visitadas, su confianza para participar en las actividades de capacitación y además, para que el tránsito en vía pública, calles o comunidades rurales gocen de menores riesgos desde el punto de vista de seguridad”.
Morena pidió un informe de si realmente hay complicaciones que afecten el proceso electoral o son casos excepcionales, a lo que se respondió que la elección no está en riesgo, pero es innegable que se generan preocupaciones por la falta de confianza ante la ciudadanía y por los riesgos en zonas con alguna complejidad de seguridad.
EDD