La población de menores recursos representan un adeudo en las ciudades mexicanas al no estar completamente integradas a la urbanización, por lo que se necesitan un mayor número de programas que faciliten el acceso a vivienda digna a la mayor parte de la población, aseguró Roberto Eibrnschutz, arquitecto, maestro de urbanismo y profesor investigador de la UNAM.
El especialista puso en contexto que 47.6 por ciento de la población mexicana vive en condiciones de pobreza, a la par, no tienen acceso a seguridad social o financiamiento y una de cada cinco viviendas en el país tienen carencias de servicios o edificación.
Agregó que el trabajo informal fomenta entre la población viviendas precarias y asentamientos irregulares donde no se cuenta con los servicios necesarios para vivir dignamente, así como la falta de vías de transporte que mejoren la calidad de vida.
Durante su participación en el foro Aproximaciones y Retos para la Vivienda Social en México, organizado por el Instituto del Fondo Nacional de la Vivienda para los trabajadores (Infonavit) y MILENIO, Eibrnschutz dijo que si bien en los últimos años se han creado programas para disminuir los rezagos sociales, aunque existe un adeudo social para las personas de menores recursos.
“Queda claro que aun la magnitud del problema es de dimensiones considerables para dar acceso a una vivienda adecuada a todos los mexicanos. Son estas condiciones las que explican que el suelo que este al alcance de los escasos recursos de los pobladores mantengan el ciclo perverso de los asentamientos urbanos irregulares”.
El académico manifestó que para atacar el problema del desarrollo equitativo de la sociedad, que es una responsabilidad del Estado, se necesita acompañamiento de las instituciones con proyectos concretos de urbanismo que incorporen a esta población al tejido urbano, instrumentos jurídicos, financieros y fiscales y pequeños créditos que ayuden a los ciudadanos a mejorar su vivienda.
En este sentido, Clara Salazar Cruz, doctora en ciencias sociales con especialidad en estudios de la población, agregó que otro rezago se encuentra en la generación de condiciones dignas para las personas con discapacidad en las ciudades.
MRA