Antes y después de Trump

Para Estados Unidos todos son delincuentes, incluso los niños. A ellos los separa de sus padres y los encierra en jaulas. A los padres por tiempo indefinido.

El maltrato continuaba e incluso aumentaba, a pesar de que la migración mexicana prácticamente se detuvo.
Nexos
Ciudad de México /

Por: Esteban Illades

Ilustración: Patricio Betteo, cortesía de Nexos

Al electorado de Estados Unidos, cuyas campañas presidenciales comenzaron el mes pasado, la situación le tiene sin cuidado. Los campos de detención no sólo están en la frontera, sino que se reparten por todo el país. Aunque este tratamiento inhumano ocurra a unas cuantas cuadras del votante promedio, Donald Trump se encuentra en la misma posición en las encuestas que hace cuatro años. Abajo del candidato demócrata pero no lo suficiente como para descartar su reelección. El hecho de que trate a migrantes como animales salvajes incluso lo acerca a otro cuatrienio.

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