Por: Jonathan Grabinsky
Ilustración: Patricio Betteo, cortesía de Nexos
Un estudio cualitativo con 247 personas en cuatro estados mexicanos, incluida la CDMX, encontró que los vínculos o lazos son recursos valiosos que los individuos usan para afrontar temas relacionados con el cuidado de la salud. Otro estudio retomó la investigación etnográfica en zonas de altos y bajos ingresos de la CDMX y encontró ejemplos significativos de “alterización” en los encuentros urbanos entre clases sociales, lo cual hace eco de los temas de conectividad económica planteados por la investigación de Chetty mencionada más arriba. De manera similar, un estudio cuantitativo sobre la segregación residencial urbana en el Área Metropolitana de la Ciudad de México encontró que vivir en una zona desfavorecida disminuye entre los hombres la probabilidad de ser un trabajador formal, y afecta la participación de las mujeres casadas en la fuerza laboral. Son necesarias otras investigaciones, tanto cuantitativas como cualitativas, para comprender el capital social tal como se desenvuelve en el espacio urbano de la CDMX, especialmente en línea con otros aspectos de la formación de amistades a través de las divisiones de clase planteados en la investigación de Chetty y coautores. Tales investigaciones deberán retomar distintas disciplinas y métodos con el fin de captar plenamente los matices de la forma en que un individuo interactúa con el espacio urbano.