Por: José Said Sánchez Martínez
Ilustración: Víctor Solís, cortesía de Nexos
Generalmente, en el debate sobre el federalismo fiscal mexicano sobresale el tema de la dependencia financiera de los gobiernos estatales. En efecto, del total de sus ingresos, 9 de cada 10 pesos provienen de las transferencias federales. Sin embargo, ¿esto quiere decir que también dependen del gobierno federal para tomar sus decisiones de gasto? No necesariamente. En términos generales, el poder de gasto se define como la capacidad que tienen los gobiernos para determinar su gasto público. Para el caso mexicano, los estudios comparados muestran resultados contrastantes: para unos, los gobiernos subnacionales tienen una autonomía balanceada, pero otros indican lo contrario.