Por Monika Meireles
Ilustración: Víctor Solís
El crédito ideal es aquel que fomenta las posibilidades de desarrollo económico, justamente siendo canalizado para financiar a la expansión de la capacidad productiva. El sistema de crédito tiende espontáneamente a ayudar a las empresas que son grandes, por la seguridad que ésas ofrecen para el repago. Las grandes empresas, por ser las preferidas de los bancos, siguen aumentando continuamente de tamaño. Eso se da porque con el acceso al crédito por parte de las grandes empresas facilitado se asiste a la aceleración en su rotación de capital, hecho que permite que para ellas el intervalo entre producir y vender sea más corto, dándoles clara ventaja sobre sus competidores.