Por: Laura Rojas Zamudio
Ilustración: Estelí Meza, cortesía de Nexos
El escenario en el que nos encontramos es complicado ante la diversidad de criterios en materia de suspensión en dos vías de control distintas: acciones y controversias. Será interesante ver si los ministros y ministras trasladan el criterio que definan para el caso de la suspensión en una acción a las controversias en las que se impugnen normas generales. En mi opinión, lo más conveniente sería que ambos recursos se resuelvan por el pleno de la Suprema Corte con la finalidad de unificar criterios y sentar precedente. Ya veremos lo que sucede, mientras tanto y hasta que no se resuelvan, los decretos impugnados del Plan B seguirán suspendidos, lo que implica que no pueden surtir sus efectos ni ser aplicados de ninguna manera.