Por: Claudia Torres
Ilustración: Víctor Solís, cortesía de Nexos
La inclusión de las mujeres en el mercado laboral no es sólo una cuestión de hacer lo correcto: también puede potenciar la productividad y el crecimiento económico en el país y en el mundo. Diversos estudios demuestran que el impacto económico de cerrar la brecha de género en el sector laboral en México representaría 0.8 trillones de dólares adicionales, agregando alrededor de 70 % al PIB nacional. En México, apenas 45 % de las mujeres tienen participación económica, contra 77 % de los hombres; esto representa una de las proporciones más bajas en Latinoamérica. Esta brecha de inclusión y representatividad aumenta si hablamos de puestos directivos —el llamado techo de cristal— en el sector privado. De acuerdo con la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE), las mujeres ocupan sólo el 7.5 % de los puestos en los consejos administrativos de las empresas más grandes de México, muy por debajo del promedio de 20 % en los países de la OCDE.