Esta es la historia de Jude Stone, un talentoso músico que construye en muy poco tiempo un imperio de la fama. En poco tiempo se convierte en uno de los grandes rock star. Pero al final eso no es todo lo que esperaba y en breve anhela a su familia, su novia y tener una vida común. Un representante de una corporación aparece en su vida para ofrecerle el anonimato deseado y las cosas toman un giro inesperado.
La historia, platicó Edgar, le llegó hace muchos años atrás, alrededor del 2009 tras la muerte de Michael Jackson al imaginar qué pasaría si esas leyendas que dice que algunas de las celebridades más grandes de la historia de la música y el cine decidieron fingir sus muertes y están refugiados en un paraíso terrenal para vivir su anonimato.
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A Edgar siempre le inquietó crear historias y estuvo a punto de irse a estudiar cinematografía si la música no se hubiese topado en su camino. “No lo había hecho porque siempre pensé que se tenía que estar estudiado, en literatura. Que tenía que ser un escritor profesional. Honestamente un día compré una libreta, la abrí, puse capítulo 1 y empecé a escribir Blue Bayou conforme me fue saliendo. Comencé a contar la historia tal como se lee en el libro, toda la esencia de lo que quería que fuera. Pasando por los personajes, las personalidades de cada uno, y se fue dando poco a poco. Después conocí a unos correctores de estilo que me ayudaron mucho a darle más forma al libro y quedó increíble”, agregó.
Al ser una historia musical, es evidente que parte de su personalidad quedó impresa ahí, tanto como sus gustos musicales, aquellas bandas y canciones que han influenciado incluso la música de Tren a Marte, de alguna manera viven en estas páginas.
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Lo que más disfrutó escribir fue imaginarse los conciertos de Jude, el personaje principal, ya que en la vida real eso también le llena como músico. “También el conocer la verdadera personalidad de los músicos que están en Blue Bayou, escribí pensando como fuese su personalidad más humana, más real de por ejemplo Michael Jackson, Freddie Mercury o Bob Marley”.
Ante la nueva experiencia de escribir una historia a diferencia de escribir una canción, dijo estar feliz y que incluso es algo que recomienda a todos. “Saber que algo es 100% tuyo, que inició de tu cabeza, de tus desvelos, de tu trabajo. Y la disciplina que le metí también a escribir el libro fue un buen aprendizaje. La verdad es que estoy súper contento con el resultado”.
LAT