El verano ha llegado y con él un aumento en las temperaturas, sin mencionar que la temporada de lluvias aún parece muy distante, por lo que más de uno notará cierta incomodidad incluso estando dentro del hogar.
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A continuación encontrarás algunos consejos para generar menor calor y mantenerte fresco durante el día:
• Hidratación. En primer lugar, es sumamente importante beber líquidos constantemente, ya que el aumento de sudoración y las altas temperaturas pueden cobrarle factura a tu salud. Procura llevar contigo algún recipiente con agua y evita refrescos, cervezas y bebidas estimulantes, aunque en un principio refrescan, en realidad pueden deshidratarte y hacer que el calor aumente.
• Guarda las cremas hidratantes en el refrigerador. Este truco le brindará un efecto calmante a la piel mientras aplicas estos productos. Si tienes niños pequeños toma precauciones para evitar accidentes.
• Organiza las tareas domésticas. Es recomendable realizar la limpieza del hogar en los momentos menos calurosos del día, como las primeras horas de la mañana o por la noche.
• Evita exponerte al sol. En caso de que debas de salir, utiliza protector solar y protégete con lentes oscuros y sombreros, gorras o sombrillas. Se recomienda utilizar ropa de colores claros y fibras naturales, preferiblemente holgada.
• Refresca los puntos clave de tu cuerpo. Una manera sencilla de disminuir la temperatura es empleando toallas humedecidas, bandas de gel frío (o incluso un chorro de agua directo) sobre ciertos puntos del cuerpo como es detrás del cuello, frente, muñecas y detrás de rodillas y codos.
• Optimiza tu espacio. Una sugerencia es dejar abiertas las ventanas por las noches que corre el viento frío y cerrarlas por la mañana, así como mantener las cortinas y persianas cerradas a fin de conservar la frescura del ambiente. También puedes emplear ventiladores, pero recuerda no acercarlo demasiado ya que puede ser perjudicial para la salud.
Juegos de agua
Este sin duda es un verano incierto en el que puede que las vacaciones deban de postergarse y los más pequeños en casa se desanimen ante la falta de estímulos o situaciones novedosas. No obstante, no hace falta salir lejos para divertirse, existe una amplitud de juegos que podemos realizar con uno de los elementos predilectos de la temporada: el agua, y sin necesidad de una piscina. Eso sí, sé muy prudente con su uso y procura reutilizar el agua para trapear el piso o regar el jardín, por ejemplo.
• Cama de agua. Puedes crear tu propia camilla de agua con un plástico resistente doblado por la mitad, cinta aislante y una manguera que rellene su interior. Los niños podrá saltar, brincar y asombrarse con la sensación.
• Tobogán casero. Un clásico de estos tiempos es crear una pista de agua donde deslizarse a gran velocidad. Para ello se expande una lona o plástico que se moja con una manguera o cubetas a fin de que todos puedan deslizarse. Para mayor seguridad, los pequeños pueden usar flotadores.
• El juego de la esponja. Esta es una divertida carrera para entretenerse un rato. Coloca dos recipientes llenos de agua; a unos 10 o 20 metros coloca recipientes vacíos paralelos a los primeros. El juego consiste en correr en equipos de dos hacia el agua con una esponja, de regreso el equipo se apoyará para cargar la esponja sin tocarla con las manos (es decir, apoyándola con sus cabezas) y vaciar la esponja en el otro recipiente. Gana el primer equipo en llenar su recipiente. Una versión alternativa es utilizar vasos y sostenerlos sobre la cabeza.
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• La pesca. Hay varias formas de pescar desde casa, ya sea que utilices algunos juguetes y coladores o realices algo más sofisticado. Por ejemplo, puedes crear peces con plásticos de colores, a los cuáles deberás de agregar un clip. Para la caña, utiliza un palo y un hilo en cuya punta colorarás un imán. Coloca los peces en un recipiente que servirá de estanque y ¡a pescar!
• Tableros de agua. Este es un entretenido juego de construcción y creatividad en el que se crea un tablero con distintos recipientes que servirán para hacer pasar el agua desde arriba hasta un recipiente debajo. Puedes emplear un recipiente de madera o un pallet para el tablero y tubos de PVC, botellas de PET, entre otros instrumentos para fijarlos en el tablero y diseñar el camino.
• Exploración glaciar. Algo sencillo pero entretenido es crear fósiles de hielo para que los paleontólogos más jóvenes excaven en busca de su contenido. Todo lo que necesitas es un recipiente donde sumergir uno o más juguetes y llevarlo al congelador, puedes agregarle un poco de colorante para hacerlo más atractivo. Obtendrás un bloque de hielo que los chicos pueden hurgar con un cincel adecuado a ellos, una pala o una cuchara
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