Inició formalmente las audiencias para recoger la opinión de los sectores interesados en la renegociación del Tratado de Libre Comercio de América del Norte. Las consultas tendrán una duración de 90 días abiertas al público en general. Concluirán el 16 de agosto con el inicio de las negociaciones tripartitas. Durante los días 27, 28 y 29 de junio se realizaron las audiencias púbicas en las que participaron 140 interesados ante los representantes de comercio de Estados Unidos. Cada uno expuso su visión, en la gran mayoría fueron positivos en favor del TLCAN, con respecto al sector o intereses que representan. La Ley de Comercio estadounidense obliga a que todos los ciudadanos participen en ellas para ilustrar los intereses de su país y aportar las diferentes ópticas de la posición que defenderán sus negociadores. Participaron organizaciones sociales representantes de sectores quienes enviaron por escrito las propuestas concretas y los testimonios de la opinión pública en general. Las autoridades comerciales reportaron más de 12 mil comentarios durante el periodo de consultas.
Durante los primeros días de las audiencias estuvieron compuestos por once paneles y el último por cinco. En ellos se destaca la participación de industrias dedicadas al sector textil, calzado, automotriz, agrícola, tecnológico, telecomunicaciones, así como de representantes de la sociedad civil y think tanks. En resumen puede asegurarse que la mayor parte de las intervenciones se inclinaron a señalar que es necesaria la modernización del acuerdo. Se propone también incorporar nuevas tendencias tecnológicas que no existían cuando el Tratado fue negociado. Durante las intervenciones que la industria agrícola, pequeña manufactura y el transporte tuvieron, se manifestaron como los sectores más afectados durante la existencia del TLCAN.
Caso particular es el sector automotriz quienes en voz de los sindicatos reclamaron a las autoridades comerciales estadounidenses, incluir en la negociación el incremento de los salarios e igualar las condiciones laborales en México. Consideran que al ser salarios más bajos y las condiciones laborales menos exigentes, dan una ventaja comparativa a los mexicanos y constituyen la razón más importante para que las empresas del sector decidan trasladarse a México. Otros sectores que se mostraron preocupados fueron los relacionados con la propiedad intelectual, en especial la industria discográfica y la farmacéutica. Dentro de las audiencias el único mexicano que participó fue el Director General Adjunto del Instituto Mexicano para la Competitividad, quien señaló que el principal objetivo en la modernización del acuerdo debe ser el incremento de la competitividad en la región norteamericana para beneficiar a los consumidores y permitir el acceso a bienes y servicios con mejores precios. En México, la Secretaría de Economía y el Senado de la República han iniciado consultas similares sobre el futuro del TLCAN. En este sentido, se espera un número de participaciones similar a las que ocurrieron en la Unión Americana. Será, sin duda, un instrumento para construir una posición del Estado mexicano que será muy valorado por los negociadores mexicanos. Inicia con fuerza un proceso difícil y riesgoso aunque también muy oportuno.