No debería haber titulado esta entrega haciendo referencia a un libro de Octavio Paz, un escritor mexicano. Debería haber utilizado un título de algún libro hecho en la India (que es, después de todo, el país invitado a esta edición de la FIL). Lo he dejado así porque, debo confesar, “Vislumbres de la India” es la tercera opción que se me ocurrió, luego de recordar un título de E. M. Forster y otro de Rudyard Kipling, es decir, otros dos autores que tampoco vienen de India.
Quiero decir que, si mi caso es representativo (y me temo que sí lo es), nos hace falta conocer mucho más sobre aquel país lejano —aquel subcontinente—, que tiene una historia milenaria y que actualmente es una de las naciones en desarrollo más aventajadas (y pobladas) del mundo.
Y ya entrados en la discusión, tampoco basta invocar a Rabindranath Tagore o V. S. Naipaul (ambos ganadores del Premio Nobel), Jhumpa Lahiri o Salman Rushdie, porque todos ellos, grandes autores sin duda, pertenecen a un grupo comparativamente muy pequeño: el de los escritores indios o de origen indio que escriben en inglés. Nos falta descubrir, más allá de ellos, un panorama enorme de obras escritas en alguna de las otras 22 lenguas oficiales del país (incluyendo el bengalí, el gujarati, el hindi, el nepalés, el punjabi, el tamil y el urdu; ¡y en el país se hablan en total 780 lenguas!) y que a esta FIL vienen representadas por Sukanya Datta, Arup Kumar Dutta, Subhro Bandopadhyay y otros.
Mi primer acercamiento a esa otra literatura india (que es más bien el grueso, el cuerpo principal de la literatura india) es la obra de Devibharati. Este escritor proviene de Tamil Nadu, en la punta sur del país, en las costas del Océano Índico, y escribe en tamil. Ha sido activista, profesor, periodista y guionista, y su primer libro traducido al inglés, su entrada en el occidente, es Adiós, Mahatma y otros cuentos. Traduje el primero para el número de la revista Luvina dedicado a esta FIL: es la historia ficcionalizada del último día de la vida de Gandhi, y contiene los hechos comprobados, pero también una imaginación fantástica que recuerda (por mencionar un libro más cercano) la fractura sorprendente de la realidad que propone Fernando del Paso en el penúltimo capítulo de Noticias del imperio. No les cuento más para que vayan y lo lean.
Para buscar en la FIL
Aunque la vastedad de la literatura de la India sería para entrar en su territorio y nunca tener que volver a salir, tampoco es que haya que desestimar todo lo escrito sobre ella por extranjeros. No está nada mal, de hecho, leer 'El mono gramático' de Paz, uno de sus poemas más extraños e intrincados, centrado en una figura mitológica de la religión védica; o 'El libro de las tierras vírgenes' de Kipling, que en realidad no conocemos del todo si sólo hemos visto alguna de sus versiones audiovisuales; o 'Coronada de moscas' de Margo Glantz, que es la cumbre secreta de un género mexicano: una variedad muy particular de libros de viaje. Si los encuentran, me avisan.