Trump 'is back'

Ciudad de México /

El presidente de Estados Unidos volvió a ser el centro del universo. Donald Trump regresó a la Casa Blanca recargado y con toda la intención de hacerse ver en todo el mundo. Cumplió con los protocolos y la cordialidad con el gobierno saliente hasta que abrió la boca en público, y vaya sacudida que le puso a los que a su lado lo escuchaban.

Las palabras de Trump resonaron en su país y retumbaron en prácticamente todo el mundo, incluido México.

Las órdenes ejecutivas que firmó impactarán de inmediato. Declarar emergencia nacional lo que ocurre en la frontera y designar a los cárteles como organizaciones terroristas fueron los dos primeros anuncios en los que gobierno, empresas y analistas mexicanos se concentraron o preocuparon. Sin embargo, el mayor descalabro llegó por la noche, cuando dijo que piensa imponer aranceles de 25 por ciento a los productos mexicanos y canadienses a partir del 1 de febrero.

Los desafíos de Trump para México quedaron clarificados:

-Miles de migrantes serán devueltos, miles se quedarán esperando sus procesos de asilo (ya les cancelaron las citas de CBP One) y miles seguirán llegando por la frontera sur.

-La presión para el combate al crimen crecerá y cualquier sospecha de vínculos financieros con el narco motivará bloqueo de cuentas, confiscación de activos y sanciones. ¿Tocará a las remesas?, quién sabe. ¿Se hará responsables a las empresas de armas?, no creo.

-La negociación comercial comenzó. México debe avanzar en el diálogo para evitar esos aranceles o hacerles frente. El gobierno de Claudia Sheinbaum determinó que toda acción tendría una respuesta y ya la debe exponer a su contraparte, al menos en privado.

Trump quiso tener la atención que hoy tiene desde 1988, cuando acudió a la convención republicana en la que nombraron a George Bush (padre) como candidato del partido, entregado por completo a un solo hombre. Hace ocho años probó un poco de esa droga, la única que consume, pues detesta el alcohol y el cigarro. Ser el centro de atención es su fascinación. Sin embargo, aquel triunfo fue agridulce: obtuvo la victoria del Colegio Electoral, pero Hillary Clinton tuvo más votos de la gente, no controló el Congreso, fue perdiendo adeptos y, por sus acciones al final de la administración, terminó confrontado hasta con su vicepresidente.

Trump volvió recargado, con millones de simpatizantes y aliados entregados en lo absoluto, incluidos los gigantes de la tecnología. Tiene al mundo entero atemorizado. Su único enemigo podría ser él mismo.


  • Alejandro Domínguez
  • alejandro.dominguez@milenio.com
  • Periodista por pasión. Dirijo y conduzco #AlexEnMilenio L-V #22hrs. Escribo la columna #RecuentoDeLosDaños cada martes. Profesor en la Universidad Iberoamericana
Más opiniones
MÁS DEL AUTOR

LAS MÁS VISTAS

¿Ya tienes cuenta? Inicia sesión aquí.

Crea tu cuenta ¡GRATIS! para seguir leyendo

No te cuesta nada, únete al periodismo con carácter.

Hola, todavía no has validado tu correo electrónico

Para continuar leyendo da click en continuar.