Coinciden las elecciones presidenciales con eventos que conmemoran la lucha de la comunidad lésbico, gay, bisexual, transgénero, travesti, transexual, intersexual y queer, conocido por las siglas, LGBTTTIQ. Ciudad de México abre museos, teatros y exposiciones alusivas al tema, a nivel oficial, privado o vía asociaciones civiles. Cumplimos 40 años de visibilidad gay. La Secretaría de Cultura del gobierno federal abre el Palacio de Bellas Artes para hablar de literatura y diversidad sexual. Ningún candidato a presidente tiene pretexto para no asumir un compromiso político con esa comunidad que igual saldrá a votar el 1 de julio.
Mes de marchas del orgullo gay inician estos días de elecciones. Mes de reivindicación de derechos humanos, contra quienes niegan que somos iguales a heterosexuales desde el punto de vista jurídico, ya consagrado en la Carta Magna, por decreto del presidente Enrique Peña Nieto, en 2016, cuando la Suprema Corte de Justicia ya había avalado el matrimonio gay en 2015. No es poco, aunque la reticencia de gobernadores de diferentes estados han detenido —básicamente por prejuicio—, que esas decisiones se propaguen en toda la República.
La comunidad de la diversidad sexual, con apoyo de la sociedad civil heterosexual más avanzada debe insistir a candidatos de elección popular derechos iguales sin discriminación de ningún tipo. No importa por quién vote la comunidad LGBTTTIQ, importa que reclamen derechos a su candidato favorito, y elijan en consecuencia. Si hoy no demostramos madurez política después de 40 años de lucha pública —gracias a la primera manifestación de nuestros derechos el 26 de julio de 1978, comandados por el fundador del movimiento gay, Juan Jacobo Hernández—, será tarde la queja posterior…
La lucha de la diversidad sexual tiene que ver con salud; la comunidad LGBTTTIQ es la más afectada por el sida (vaya corriendo al Museo de la Ciudad de México y entérese con la muestra El chivo expiatorio. Sida. Violencia. Acción). Cultura: literatura de tema gay existe de tiempo inmemorial y Bellas Artes dedica un mes de actos, con escritores sobre lo gay. La historia, en el Museo de la Tolerancia, a pesar de los errores. Y el Festival Mix, de cine, o el Festival Internacional por la Diversidad Sexual en diferentes foros puede abrir conciencia para que ningún candidato presidencial diga vaguedades sobre los derechos humanos de las minorías sexuales.
TRASPIE: Por primera vez en Tuxpan, Veracruz (mi pueblo), ayer realizaron la primera Marcha del Orgullo LGBT, por “la igualdad, la diversidad, la dignificación y el respeto”. ¡Avanzamos!