Un partido anodino en el marco del moletour de la Selección Mexicana de Futbol, se disputa mañana por la noche en el estadio Cuauhtémoc de Puebla. La meca del mole con un encuentro ídem: México vs. Valencia.
La relación entre la Selección Nacional y la ciudad de Puebla data de mucho tiempo atrás, desde la inauguración del estadio, con aquel México ante Checoslovaquia del 6 de octubre de 1968. Empero, diecisiete años transcurrieron para que "el equipo de todos" regresara a la Angelópolis. En 2007 se disputó la mitad de un molero e insustancial México vs. Panamá, que no concluyó por un aguacero. En aquella ocasión, los poblanos respondieron con un entradón. Al conjuro de la presencia de Hugo Sánchez como entrenador, y con la fiebre por el regreso a la máxima categoría del equipo de La Franja, el ánimo era otro por completo.
Esta vez, regresa el equipo tricolor para encarar un partido que es un insulto más, para una futbolerísima pero vapuleada plaza.
Hasta que el estadio Azteca cerró sus puertas para la remodelación de cara al mundial de 2026, y las entradas en Estados Unidos no resultaron lo que solían ser, fue que la Federación Mexicana de Futbol volteó a la provincia. Pero ya es demasiado tarde.
Con un enésimo "borrego" sobre la supuesta mudanza del Puebla a otra plaza, bravatas y socarronería del dueño del club, y una pésima racha de su equipo local, los aficionados en la Angelópolis se han distanciado, por ahora, del balompié.
Los boletos no se vendieron como se esperaba y se comenzaron a malbaratar y a repartir con promociones para los abonados del Puebla. Dinámicas para quienes conservaron su boleto mojado de aquel México vs. Panamá de hace 17 años o cortesías por todas partes para llenar el Cuauhtémoc y maquillar el fracaso taquillero del club, el gobierno y la FMF.
El equipo Ché viajó con nueve bajas de su plantilla "estelar"; seis titulares regulares de una temporada que ha sido una pesadilla, entre lesiones, graves imputaciones extra cancha y pésimos resultados. Rubén Baraja no podrá contar con Rafa Mir (que tiene serios problemas legales, además de su lesión), Jaume Doménech, Mouctar Diakhaby, José Luis Gayà (capitán y el único sobreviviente de la etapa de Andrés Guardado en su paso por Valencia) y Hugo Duro. Todos ellos por lesión.
Por si fuera poco, pierde a tres internacionales convocados por las inferiores de España: Javi Guerra, Diego López y, de lo poco bueno, Cristhian Mosquera. Tampoco estarán los seleccionados Giorgi Mamardashvili, convocado por Georgia, y Stole Dimitrievski, de Macedonia del Norte. Es altamente probable que veamos el debut de un portero: el joven Raúl Jiménez Latorre. Un alicantino de 18 años, que suele atajar en el Valencia C.F. Mestalla de la Segunda Federación.
El partido es una tomada de pelo para la afición. Eso sí, medio millón de dólares para el dueño del club naranjero, Peter Lim. El singapurense es el único que al parecer hizo negocio con el molero, molerísimo encuentro de Puebla.