Que dicen en radio pasillo que, cuando 59 millones de pesos deciden regresar solitos al erario, la justicia respira hondo… y luego se va a tomar un café. Porque, según el auditor superior del estado, si Jessica Blancas, ex tesorera de Omar Fayad, devuelve el dinero, aquí no ha pasado nada. Reintegración y absolución exprés, como si los millones fueran fichas de dominó que se acomodan con un golpe en la mesa. O sea que, el “no hay nada en contra de la ex funcionaria” no es del todo cierto.
Que la historia es curiosa: cuatro contratos, ninguno de la famosa Estafa Siniestra, pero todos con ese aroma a consultoría de lujo que en el mercado costaba menos. Entregables que no entregaban y precios que subían como si les diera vértigo quedarse en el piso. Una auditoría extraordinaria en 2024 despertó las sospechas pero, milagros de la administración pública, aquí todo tiene solución si se reembolsa la cifra adecuada. Y sí lo que importa es resarcir al erario, de nada sirve algunos en el bote con millones en la bolsa.
Que a marchas forzadas el Instituto Estatal Electoral de Hidalgo anda organizando la consulta del domingo respecto al parque ecológico de Tula y ya tienen 108 de los 234 funcionarios necesarios para operar la consulta es decir, van a medio tanque y con la aguja temblando. Pero nada que un poco de optimismo institucional no pueda resolver; las mesas receptoras también avanzan: 57 confirmadas, 21 perdidas en el limbo del “ya casi”. Cada mesa requiere presidente, secretario y escrutador, un pequeño gabinete en miniatura para administrar la voluntad popular.
Que este domingo es el día D para el proyecto pues tras el ejercicio democrático al menos más organizado que una simple consulta a índice levantado los ciudadanos de Atitalaquia, Tlaxcoapan y Tula decidirán el futuro de los terrenos de la fallida refinería que hoy lucen más abandonados que el mueble del rincón. Las autoridades de los tres niveles de gobierno confían en que triunfe el sí porque de otro modo ya tienen en mente para dónde redirigir el parque lo que sería algo lamentable para la entidad, ya que se perdería una oportunidad histórica de detonar inversión.