Que hasta el 14 de noviembre se llevará a cabo la edición número 17 del Festival Internacional de Puebla, que este año reunirá a más de 45 artistas nacionales e internacionales en distintos foros de la capital y el interior del estado. Se dice que todos los eventos serán de acceso gratuito, con el propósito de acercar la cultura a todos los sectores de la población. Además, se lanzó una convocatoria solidaria para que los asistentes donen alimentos no perecederos para comunidades afectadas de la Sierra Norte; un gesto humano que busca combinar el arte con la empatía social.
Que este mismo mes iniciarán las obras de mejora en el drenaje y césped del Estadio Cuauhtémoc; el objetivo es cumplir los estándares que exige la FIFA para las sedes de entrenamiento del Mundial de Fútbol 2026. Sin embargo, aunque Puebla fue considerada como candidata, se advierte que eso no garantiza su designación final para dichos fines, pues el organismo internacional aún realizará nuevas inspecciones antes de otorgar la certificación definitiva. Y además, aun está pendiente el cambio de nombre a Manuel Lapuente, ya que si esto ocurre, tendrán que registrarlo así ante la máxima autoridad del balompié.
Que ante la llegada de la temporada invernal, el estado cuenta con 187 albergues distribuidos en distintas regiones para atender a la población ante las bajas temperaturas y brindar refugio a las familias más vulnerables frente al descenso térmico que se prevé en las próximas semanas. Se adelantó que las autoridades estatales difundirán constantemente la ubicación de los refugios temporales y las medidas de prevención pertinentes para evitar cualquier riesgos de salud.
Que por ahora, la Secretaría de Gobernación descartó realizar una consulta entre las comunidades cercanas a La Malinche sobre el proyecto del Ecoparque Tlalli-Malinche. Dicen que primero deberán concluirse los trámites, obtener los permisos y estudios de impacto ambiental antes de someter la obra a la opinión de los habitantes de la zona. Aseguran que la prioridad actual es garantizar que el proyecto cumpla con toda la normatividad y requerimientos técnicos antes de abrir el proceso al diálogo social.