A la crisis hídrica que se vive parece que no se le está dando la importancia debida. El riesgo de un problema de salud pública por falta de hidratación es muy alto. Pero tal parece que son pocos los que hacen conciencia y aún más pocos los que gozan de agua en abundancia en sus propiedades sin importar la necesidad que hay al exterior.
Al finalizar 2023, la presa de Miguel Alemán, conocida como Laguna de Valle de Bravo, principal abastecedora del sistema Cutzamala, estaba al 41.9 por ciento de su capacidad de almacenamiento, en un mes es decir al 31 de enero del 2024 cayó al 39.3 por ciento de su capacidad.
Lo anterior se sustenta de acuerdo con el propio informe de la Comisión Nacional del Agua (Conagua) que expone los embates de la sequía severa y extrema incrementó en la cuenca del Río Cutzamala en las dos últimas semanas de enero, afectado el almacenamiento de las presas del Sistema Cutzamala, que se encuentran al 39.3 por ciento de su capacidad.
En el Monitor de Sequía al 31 de enero, se observa un ligero incremento en la sequía severa y extrema denominación de D2 y D3en la cuenca del río Cutzamala. las categorías D2 y D3 cubren el 69.3 por ciento de la cuenca local, es una cifra mayor en comparación con la quincena anterior al 31 de enero de 2024.
En términos llanos o como se dice en el lenguaje coloquial, la capacidad de abastecimiento del río Cutzamala, ha perdido más del 30 por ciento y eso se refleja en lo que llega a la laguna,de igual forma las otras cuencas que abastecen la laguna de Valle de Bravo, los ríos Tiloxtoc, Malacatepec, Temascaltepec, Tizates y los manantiales y escurrideros, han bajado su caudal, de 16 metrs cúbicos por segundo que le daban a la presa en el año 2000, ahora apenas le dan 6 metros y ocho metros cuando las lluvias son benévolas.
Aquí hay dos problemas, uno la baja del caudal de los ríos propia de la demanda y también los desvíos que de los caudales hacia lagos artificiales privados, así como bordos.
Hay dos lagos artificiales privados que tienen una extensión de diez hectáreas con una profundidad de 8 metros lo que equivale a más de 6 millones de metros cúbicos que le han quitado a la laguna de agua.
Pero, es más lo que le roban a la laguna, pues son 275 lagos privados detectados y cuyas extensiones en conjunto superan las 500 hectáreas.
El martes habrá una reunión de activistas con directivos de la Conagua, ojalá haya un compromiso de clausurar esos lagos y que esa agua llegue a la laguna para recuperar parte de lo que ha perdido. De lo contrario en menos de lo que lo pensemos, la presa será historia.