Terminan las campañas para la gubernatura en Hidalgo, pero están frente a los ojos de todas y todos, los mensajes políticos, las señales y las claves de qué es lo que pasará el domingo 5 de junio. Las dos principales coaliciones electorales en la contienda terminaron la última semana de la etapa proselitista con acusaciones y señalamientos, lo que nos indica que no se quedarán las cosas tan tranquilas en los días que vienen.
Una cosa es que no haya candidatos en la calle, que no haya campaña en vivo, pero estarán las redes para seguirse atacando, los mensajes a celulares, las llamadas falsas, las fake news, las encuestas de Facebook que intentarán manipular al electorado.
Por otro lado, qué han dicho los propios aspirantes. De ambas partes se dicen ser mesurados, estar tranquilos, pero sus acciones son distintas, envían señales de guerra política y piden paz al mismo tiempo.
También están los dirigentes de partidos, quienes no se han quedado callados, los coordinadores de las campañas, que son los que más actividad en medios han tenido; hay mucho en juego y por eso Hidalgo se convirtió en una especie de joya de la corona de estas elecciones, pues el ganador tendrá ventaja política para 2023 y 2024.
Desde el gobierno federal también se ha enviado el mensaje de salir a votar, de no dejarse intimidar, de denunciar los actos delictivos, pero ¿hay confianza en las instituciones tanto electorales como de seguridad?
Se exponen demasiado los votantes si entran al juego de los políticos, y eso es algo que no ven o no quieren ver quienes desean el sufragio de la gente. Quizá lo mejor para el ciudadano será resguardarse lo mejor posible de aquí al 5 de junio, no esperar nada y consultar información de canales serios, oficiales, de medios acreditados y poder tener tranquilidad para ir a las urnas como un ejercicio ciudadano y constitucional.
Eduardo González
twitter: @laloflu