Alfredo del Mazo Maza se va a gusto. No lo tocaron ni con el clásico látigo del desprecio mañanero. Mucho menos con alguna pesquisa.
El domingo, el Partido Revolucionario Institucional perdió Estado de México, “la joya de la corona”. Esa entidad que el PRI gobernó durante casi cien años y que encumbró al poderoso Grupo Atlacomulco mejor conocido, con justa razón, como “Grupo Atracomulco”.
La diputada del tricolor Paloma Sánchez dijo que eso pasa cuando un gobernador le da la espalda a su partido y opera en contra de él. Y preguntó: ¿qué embajada habrá negociado Alfredo del Mazo?
Veremos si el mexiquense se suma a los mandatarios priistas que, luego de perder elecciones donde gana el movimiento de López Obrador, se integran al equipo del adversario.
No creo que Alfredo sea tan exigente como para esperar un puesto de alto rango en el servicio exterior. Con que no lo indaguen y, en su caso, lo detengan, se dará por bien servido.
Y es que, además de abandonar a su suerte a dos mujeres de su familia política, Laura Morán y Alejandra Cuevas, cuando fueron injustamente perseguidas por Gertz Manero, Del Mazo aparece en importantes investigaciones periodísticas. Es uno de los protagonistas de la llamada estafa maestra.
De acuerdo con los datos presentados por Animal Político y retomados por el observatorio de redes de corrupción del IIJ-UNAM, su rol al frente de Banobras fue clave para el desvío de recursos.
Luego, Del Mazo se fue a encabezar Edomex. Y ahí, María Teresa Montaño (amenazada por su labor) descubrió un modus operandi similar al de la estafa maestra y al de las empresas fantasma de Veracruz.
La semana pasada, The Guardian publicó el trabajo de Montaño y del consorcio que la apoyó formado por Forbidden Stories. “Las empresas fachada del Estado de México” visibilizó anomalías de contratos que rebasan los 5 mil millones de pesos. Una raya más al tigre.
Toda persona es inocente hasta que se le demuestre lo contrario, pero las autoridades deben investigar. Sin embargo, el común denominador es el carpetazo y el empleo de la procuración de justicia como arma política o instrumento de vendettas.
Ah, y el uso de embajadas como trofeos de pactos.
Aquí entre nos
A “los Delgado” los pueden criticar sus compañeros, pero de que Mario ha ganado… ha ganado. Y de que Dante advirtió que no se sumaría a la alianza opositora porque se hunde como el Titanic… lo advirtió.