Atribuida al ideólogo del PRI, Jesús Reyes Heroles, la frase “en política la forma es fondo”, significa que los modos, gestos, actitudes, comportamientos, palabras,etc., o sea, lo externo, es materia o substancia que puede influir en decisiones trascendentales en la carrera de un político o funcionario público.
Para ilustrar esa frase se cuenta la anécdota de que Javier García Paniagua, presidente nacional del PRI, le dijo a Oscar Ramírez Mijares, presidente de la CNC, que sería el candidato del tricolor, a la gubernatura de Coahuila, en1981; mandándolo llamar a los pocos días el Presidente José López Portillo, preguntándole que si sabía por qué lo llamó, contestándole que sí, que porque iba ser el candidato, y que se lo había dichoGarcía Paniagua; diciéndole encolerizado el primer mandatario que entonces fuera con éste para que lo hiciera candidato; dándole finalmente López Portillo la candidatura a José de las Fuentes Rodríguez.
Eso significa que Ramírez Mijares no fue discreto ni prudente ni guardó las formas que se deben de seguir en política; olvidó que en aquellos tiempos al gran “Tlatoani” se le rendía pleitesía como a un dios y que él era el único que decidía y decía quién sería gobernador.
El día ultimo de julio en Saltillo, inicióla entrega–recepción del gobernador Rubén Moreira a Miguel Riquelme, quien todavía no es gobernador electo,pues su constancia de mayoría está siendo severamente impugnada en el Tribunal Electoral de Coahuila y tiene en puerta un dictamen del Instituto Nacional Electoral, de un supuesto exceso en el tope de gastos de campaña, que puede anularle su presunto triunfo, es decir, su caso aún todavía está sub judice, pendiente de que los tribunales digan la última palabra.
No sabemos cuál será la sanción ni quien la impondrá al PRI-gobierno por haber faltado a las formas que deben guardarse en la entrega-recepción de la administración estatal; pero sí sabemos que la ciudadanía está indignada por faltarles el respeto; además de que esto constituye un retroceso para el estado de derecho y para la vida democrática no sólo de la entidad sino también para el país; lo que viene a enrarecer el clima de paz y tranquilidad tan necesarios hoy en día.
Desde luego que esta apresurada y desesperada entrega-recepción, no es una prueba de que ya está definida la pasada elección de gobernador; sino al contrario, es una muestra delainseguridad del triunfo y de su desaseo, que todavía pueden limpiar los tribunales.
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