Hoy, si el cliente de un banco en México ya registró sus datos biométricos con su institución financiera y quiere abrir una nueva cuenta, pedir un crédito o realizar algún trámite que antes era forzoso hacer en la sucursal con identificación en mano, puede solicitar una videollamada y hacerlo eso sin ir físicamente al banco.
Esto es parte de la nueva disposición de la Comisión Nacional Bancaria y de Valores (CNBV), que entrará en vigor el próximo 1 de abril, la cual obliga a los bancos en México a capturar la huella dactilar de los usuarios y cotejar con su credencial del INE para poder realizar trámites de nuevas formas y, además, evitar la suplantación de identidad.
Esto es solo el principio de una nueva era de identificación digital, que podrá utilizar reconocimiento facial y otros datos biométricos, la cual están compilando los bancos no con herramientas propias, sino mexicanas.
NA-AT (conocimiento en maya) Technologies es una organización de origen mexicano que con sus tecnologías permite digitalizar procesos, validar identidades y legitimar operaciones a distancia, con lo que ya ha logrado trabajar con 33 bancos en México, siete de las aseguradoras más grandes de América Latina, cuatro casas de bolsa y 25 fintechs y fondos de retiro.
Por lo tanto, quienes tenemos una cuenta en el banco, debemos ir muy pronto a validar nuestra identidad mediante datos biométricos y credencial del INE.
Ojo, solo esa identificación es la que realmente puede ser usada por lo bancos de manera más ágil para el trámite, pues como me explicaba Carlos Chavarría, CEO y fundador de NA-AT Technologies, “ninguna otra identificación oficial tiene la capacidad de que de manera pública y abierta pueda validar una identidad, por eso te pedirán esta credencial y, si no la tienes, tendrás que presentar otras dos (pasaporte y licencia) y el proceso tardará un poco más” .
Una vez validada la identidad con el INE y con Renapo, el usuario podrá realizar trámites más confiables, rápidos y, como decía, a distancia. “Imagina lo que esto permitirá para personas en zonas rurales que antes tenían que trasladarse durante horas para hacer algún trámite en un banco, o los pensionados que tienen que hacer la famosa prueba de vida, con esto desde un teléfono celular podrían hacer la videollamada, validar su identidad y hacer el trámite” afirma Chavarría.
El tema de si estos datos acabarán en manos de gobierno, por ejemplo, ya es algo que los bancos y la ley de protección de datos están viendo, pues, cada vez más, los estados avanzan en cuestión de acuerdos para la creación de la cédula única de identidad, pero lo cierto es que todos debemos ir al banco pronto para dejar nuestros datos y, ahora sí, tal vez nunca más pisar una sucursal.
fernando.santillanes@milenio.com
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