Eran los mejores alumnos del colegio, tenían mucha empatía y afinidad”, cuenta la madre de Ana María Serrano, la joven asesinada presuntamente por su ex novio en Edomex.
“De esas relaciones normales que tendrías con cualquier adolescente: conocimos a sus papás, habían viajado juntos, iban a comer hasta a casa de mis suegros”.
¿Cómo se convierte un amor adolescente en una tragedia? ¿Cómo se pasa de un supuesto enamoramiento a asesinar a quien se supone que tanto “amas” porque no quiere regresar contigo?
Sería hipotético y aventurado afirmar que su novio diera señales de la profunda psicopatía que llevaba tan dentro.
Hay personas que ocultan muy bien una mente torcida y errática; van por la vida aparentando normalidad y ecuanimidad.
Cuando la chica terminó con esa relación, el ex novio se empeñó en volver y ejerció mucha presión psicológica sobre ella, y al no ver una respuesta favorable, todo apunta a que decidió terminar con su vida asfixiándola.
¿Por qué nos ha costado tanto trabajo como sociedad, el darnos cuenta de que nuestros conceptos tradicionales sobre el amor están bastante equivocados?
Tenemos una grave confusión entre el amor y el apego; pensamos que la gente está obligada a querernos, y lo convertimos en un control, en una manipulación.
El amor nace o no nace. Se siente o no se siente. No puede ser forzado. Y eso, el amor auténtico, es justamente lo que no conocen los homicidas pasionales.
Conocen el apego, el miedo, la soledad, la codependencia, el control y la manipulación. Poseen una visión enferma sobre las personas “amadas” que los hace percibirlas como objetos de su pertenencia.
No entendemos la profunda necesidad de recibir educación emocional en una edad temprana, cuando aprendemos los conceptos sobre las cosas más significativas.
Y si esos conceptos son erróneos y retorcidos, nuestros filtros y actitudes lo serán también.
Se supondría que nuestros padres deberían transmitirnos los fundamentos para la salud emocional… En el caso de Allan “N”, el probable asesino, algo salió muy mal en su dinámica familiar.
¿Para cuánta gente que hoy vive una relación tóxica es solo cuestión de tiempo para un desenlace fatal?