Venganza es lo que quieren los San Francisco 49ers en su rivalidad frente a los Kansas City Chiefs este domingo, cuando se enfrenten en el Levis Stadium, luego de que los californianos fueran superados por Patrick Mahomes y los Kansas City Chiefs en el Super Bowl LVIII.
La rivalidad entre estos dos equipos se ha vuelto un clásico.
En las últimas cinco temporadas, en un par de ocasiones se han enfrentado en el Super Domingo, y en ambas ocasiones los Chiefs se han alzado con la victoria, una situación que quieren revertir los californianos, aunque sea en temporada regular.
Muchos son los detractores que tiene Patrick Mahomes, quienes argumentan que está cobijado por muy buen equipo, que lo ayudan las decisiones arbitrales para ganar los partidos… Sin embargo, fuera de todo ello, este joven de apenas 29 años ha demostrado ser la nueva leyenda de la NFL, y va camino a ser uno de los mejores en la historia.
El egresado del Texas Tech ha demostrado todo: ha ganado 3 Super Bowls, tiene estadísticas impresionantes, todas las temporadas en que ha sido titular ha llegado al Pro Bowl, ha sido el jugador más valioso en un par de ocasiones… No se le puede pedir más para considerarlo al nivel de Brady, Manning, Marino, Montana o quien gusten agregar a la lista.
En este 2024, Mahomes ha dejado constancia de su grandeza; tiene marca de 5-0 y, aunque sus números no son maravillosos —incluso son bastante regulares—, ha desarrollado y encontrado la manera de ganar partidos, ayudado, sin duda alguna, de una buena defensiva.
Las fortalezas de Kansas City y Mahomes no se basan en tirar 3 o 4 pases de anotación por partido, sino en su liderazgo de lograr primeros y dieces, anotaciones en el momento preciso, cuando más lo necesitan (que es en tercero y cuarto cuartos), con jugadores bastante ordinarios, pero que hacen lo necesario y cumplen para mover las cadenas y lograr puntos.
Rashee Rice, su mejor receptor, está fuera por lesión el resto de la temporada; la misma situación la tiene su mejor runninback, Isiah Pacheco, quien no jugará más en 2024.
Aun así, han ganado los cinco partidos que han disputado en la campaña.
A la defensiva, son los sextos mejores de la liga, con jugadores muy rápidos y habilidosos para poner presión a los pasadores contrarios, encabezados por el multi Pro Bowl Chris Jones.
Pero todo el éxito que ha tenido Kansas City no se debe solamente a Mahomes.
Otro artífice muy importante ha sido Andy Reid, el extraordinario entrenador en jefe del equipo, y quien hoy por hoy es el mejor de la NFL; un hombre con los merecimientos necesarios para ser considerado uno de los mejores en la historia, aunque con un perfil bajo, sin llamar mucho la atención y sin aparadores, pero muy efectivo y eficiente dentro del terreno de juego.
El football se gana por resultados y no por estadísticas solamente. Prueba de ello es que San Francisco tiene la segunda mejor ofensiva en yardas ganadas, así como la octava en términos generales, pero solamente ha ganado tres partidos y ha perdido otros tres.
Para beneficio de los 49ers, juegan en una división débil que les permite compartir el liderato del sector con los Seattle Seahwaks, con marca de 3 y 3, por encima de los Arizona Cardinals y los Angeles Rams, un equipo que se ha desmoronado de manera dramática en este 2024.
La ausencia de Christian McCaffrey por lesión le ha afectado mucho al equipo; se han visto inoperantes por tierra y Brock Purdy no ha podido con el paquete de llevar al equipo por buen puerto en esta campaña.
Purdy tiene tres receptores de calibre Pro Bowl en Deebo Samuel, Brandon Aiyuk y George Kittle; no obstante, no ha podido conectarse y entrar en ritmo con ellos, tal y como lo esperaba el entrenador Kyle Shanahan.
Purdy ha mostrado tener mucho talento, sin embargo, necesita demostrar más consistencia, ya que juega en uno de los equipos considerados grandes de la NFL, tales como los Dallas Cowboys, Pittsburgh Steelers o New England Patriots, donde la exigencia de prensa y afición es mucho mayor que en el resto de los equipos.
Este domingo San Francisco pudiera no contar con el tackle estelar Trent Williams, quien cuida el lado ciego de Purdy y sin duda el hombre más importante de la línea ofensiva del equipo, por lo que buscan que se recupere de su lesión y pueda cuidar a su joven pasador.
No solamente a la ofensiva los “filibusteros” han tenido problemas con las lesiones, sino también a la defensiva, donde Leonard Floyd y Charvarius Ward, entre otros, no han practicado con regularidad durante la semana para este partido.
Los estelares Nick Bosa y Fred Warner deben aportar más al equipo. Sus compañeros los necesitan a plenitud; hasta ahora su producción no ha sido la esperada ni a lo que nos tienen acostumbrados, toda vez que siempre juegan a nivel All Pro, y en esta campaña, después de seis juegos, entre ambos tienen apenas seid sacks.
En las últimas tres lo hicieron con una buena cantidad de puntos: 30 y 36, sin embargo, cayeron frente a Arizona por uno. Un triunfo frente a Patrick Mahomes le vendría muy bien para el estado anímico del equipo.
La clave para ganar para San Francisco será mantener la mayor cantidad de tiempo fuera del terreno a Mahomes, obligarlo a series de tres jugadas y para afuera del campo, no dejarlo tomar ritmo ni tampoco buscar a sus receptores en segunda o tercera ruta.
Necesita ser un juego muy físico con golpeo para mantenerlo intranquilo.
Este domingo se espera un duelo intenso, parejo, ya que los jugadores saben que pudieran enfrentarse de nueva cuenta más adelante, si es que San Francisco mejora y toma ritmo.
Para ello, ganar este partido pudiera colaborar, ya que estarían cobrando venganza a su acérrimo rival, quien les tiene bien tomada la medida y al que, además, le quitarían lo invicto en esta temporada 2024.