El retiro de dorsales implica una decisión tanto deportiva como económica para las instituciones.
Práctica imposible a nivel de Selecciones por la normativa FIFA y común en la NFL, sacar de circulación un número representa el máximo reconocimiento de un equipo hacia la contribución de un atleta.
La Liga española no permite el retiro de dorsales y sigue la secuencia FIFA, donde el primer equipo lleva los números 1 a 25 consecutivos.
Ante el Levante y en el Camp Nou, Ansu Fati entró de cambio luciendo el #10 que tantos años portó Messi y anotó en los pocos minutos que disputó.
El Barça como club de socios trasciende la figura del argentino, sin embargo, su repentina salida a París y la falta de acciones acorde a la contribución de Messi, me lleva a pensar en que la ruptura fue grave.
Los números no mienten, y el Barcelona pudiera sacar mucho mejor rendimiento de homenajear al argentino en el jersey blaugrana con un escudo o leyenda en reconocimiento y agradecimiento a Leo, que de las ventas de la elástica con el dorsal que hoy porta Ansu Fati.
Como ejemplo, Nike y Jordan hicieron una marca memorable con un logo icónico y lejos de rencores, bien haría el Barça en respetar y reconocer el legado Messi.
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